RÍO DE JANEIRO.- La favela Rocinha, la más grande de Brasil, ya está lista para recibir en la próxima madrugada la operación Choque de Paz, con la que se espera ponerle punto final al control del lugar por parte de los narcotraficantes e instalar allí una Unidad de Policía Pacificadora (UPP).
Según informó hoy el responsable de la tropa militar que ingresará a la favela ubicada en la lujosa zona sur de Río de Janeiro, el capitán de mar y guerra Yerson de Oliveira Neto, el operativo se llevará a cabo por el mayor contingente de militares ya usado en acciones similares en comunidades cariocas.
La acción, que ocurrirá cuatros días después de ser capturado el poderoso jefe del tráfico de drogas, Antonio Bonfim Lopes, alias "Nem", contará con la participación de 18 unidades blindadas modelo Lagarta Anfibio -que cuentan con lanzador automático de granada M275 y ametralladora calibre 50- y un grupo de 194 personas que aportará la Marina.
También participarán varios fusileros navales, efectivos de los batallones de Operaciones Policiales Especiales (BOPE) y de Choque, y agentes de las policías Civil, Caminera y Federal.
"Estamos preparados para el combate, para lo peor. La orientación para los fusileros es que tengan mucho cuidado con la vida de la población civil. Recomendamos a los residentes que dejan libres de cualquier obstáculo las vías por donde van a pasar los blindados.
El ingreso a la comunidad se realizará por tierra y aire, "para crear desorden, desarticular y no dar oportunidad a ningún tipo de reacción a las fuerzas de ocupación", añadió Oliveira.
Desde las 2:30 de la madrugada del domingo, serán bloqueadas las principales vías de acceso a las favelas Rocinha, Vidigal y Chácara do Céu, localizadas en la zona sur de la capital carioca.
Por su parte, el Cuerpo de Bomberos dispondrá un hospital de campaña en la sede de la "Escola do Samba" Académicos da Rocinha. El hospital Miguel Couto, el más próximo al lugar donde se desarrollará el operativo, será el centro de salud que recibirá eventuales heridos.