Primer Ministro de Turquía, Tayyip Erdogan.
AFP.ANKARA.- El Primer Ministro turco, Tayyip Erdogan, pidió el martes al Presidente sirio, Bashar al-Assad, que dimita por el bien de la paz en la región y afirmó que Turquía no podía dar la espalda al pueblo sirio.
Erdogan indicó que Assad debería aprender una lección del destino de Moammar Jaddafi - el líder libio derrocado por rebeldes en agosto y que murió tras su captura el mes pasado - y que las críticas a la violenta represión del Gobierno sirio a los manifestantes no equivalían a un llamamiento a la intervención militar internacional.
En una nueva señal de que Turquía estaba incrementando la presión sobre su antiguo aliado, la cadena "CNN Turquía" dijo que el comandante de las fuerzas terrestres turcas había viajado a una ciudad cercana a la frontera siria para inspeccionar a las tropas fronterizas turcas.
"Sin derramar más sangre, sin causar más injusticias, por el bien de la paz para el pueblo, el país y la región, finalmente dimita", señaló Erdogan en un discurso dirigido directamente a Assad.
"No tenemos los ojos puestos en el territorio de ningún país, no deseamos interferir en los asuntos internos de ningún país", apuntó.
"Pero cuando un pueblo es perseguido, especialmente un pueblo que es nuestra familia, nuestros hermanos, y con el que compartimos una frontera de 910 kilómetros, no podemos en absoluto pretender que no está sucediendo nada y volver la espalda", expresó Erdogan.
Después de cortejar durante mucho tiempo a Assad, Turquía ha intensificado en los últimos meses las críticas por la incapacidad de su vecino para poner fin a una ofensiva de ocho meses contra las protestas y poner en práctica las prometidas reformas democráticas.
Los líderes turcos tienen como objetivo al líder sirio casi todos los días desde que misiones diplomáticas de Turquía dentro de Siria fueran asaltadas por multitudes pro-Assad este mes.
Erdogan instó de nuevo a Asad a encontrar a los autores de esas incursiones y de un ataque contra un autobús que transportaba a peregrinos turcos en Siria el lunes.