DURBAN.- Brasil se alineó este lunes a la hoja de ruta de la Unión Europea (UE), que propone un acuerdo global de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, y apostó por un mecanismo similar al Protocolo de Kioto (PK) que acabe sustituyendo a éste en 2020.
"Queremos un futuro para la lucha contra el cambio climático en 2020, y queremos que sea (un marco global) con obligaciones legales", afirmó Alberto Figueredo, negociador jefe de la delegación brasileña, sede de la Cumbre de la ONU sobre Cambio Climático (COP17).
"Hay dos modelos: uno que se basa en intenciones de reducción de emisiones, y que no sabemos si se harán, y un modelo como el del PK, en el que todos tienen las mismas normas. Nosotros estamos por ese acuerdo", aseguró el representante brasileño.
La delegación sudamericana se mostró dispuesta a asumir "en cualquier momento" obligaciones en la lucha contra el cambio climático, "siempre que haya un acuerdo legal internacional, sólido y en consonancia con los estudios científicos".
Tal aceptación de los países en desarrollo de este nuevo marco internacional depende de la renovación del Protocolo de Kioto, cuyo primer periodo expira en 2012, y al que Canadá, Japón y Rusia ya han anunciado que votarán en contra.
Este tratado es el único instrumento que obliga legalmente a la reducción de emisiones, en el que participan todos los países desarrollados a excepción de Estados Unidos.
"Esperamos negociaciones importantes esta semana para lograr una renovación del PK. Como parte del G77+China (grupo de 130 países en desarrollo, incluidas naciones emergentes como China o Brasil), estamos trabajando muy duro para que sea posible", apuntó Figueredo.
La UE ha condicionado la firma a la puesta en marcha de una hoja de ruta para lograr en 2015 un acuerdo de reducción de emisiones que entraría en vigor en 2020 y comprometería a todas las grandes economías, con una prórroga del Protocolo de Kioto como transición.
"Creemos que la idea de una hoja de ruta es muy útil para ir dando pasos. Creemos que es necesario un segundo periodo del Protocolo de Kioto, y la UE ha dicho que lo hará si ve muestras claras en el futuro (para un acuerdo global). Creemos que es posible. Soy optimista en que puede ser el resultado de Durban", concluyó.