PARÍS.- El gobierno francés recomendó que unas 30.000 mujeres con implantes mamarios de la marca PIP se sometan "preventivamente y sin urgencia" a una operación para que se les retiren las prótesis, aunque descartó que éstas aumenten los riesgos de cáncer.
El ministro de Salud, Xavier Bertrand, desea que "preventivamente y sin urgencia" se proponga a las mujeres concernidas "la explantación de las prótesis, incluso sin signos clínicos de deterioro del implante", indicó un comunicado de la cartera.
Ocho casos de cáncer fueron señalados en mujeres portadoras de la prótesis de la sociedad francesa Poly Implant Prothèse (PIP) aunque hasta el momento no se ha podido establecer ninguna relación de causa y efecto.
Las prótesis mamarias PIP no aumentan el "riesgo de cáncer", indicó un informe de expertos difundido el viernes en París.
"En este momento no existe un riesgo mayor de cáncer en las mujeres portadoras de prótesis mamarias de la marca PIP en comparación con otras prótesis", señaló el informe elaborado por un comité de expertos del Instituto Nacional del Cáncer (INCa) a pedido del ministerio francés de Salud.
"En cambio con relación a esas prótesis se ha establecido claramente un riesgo de ruptura y el poder irritante del gel que puede provocar reacciones inflamatorias, lo que dificulta la explantación (retiro)", subraya el informe.
En Francia unas 30.000 mujeres tienen implantadas prótesis mamarias PIP, algunas de las cuales están rellenas de un gel de silicona sin fin médico que provoca riesgos de pérdida y de ruptura.
Antes de que la empresa fuese liquidada en marzo de 2010, las ventas para la exportación de Poly Implant Prothèse, que producía unas 100.000 prótesis anuales, representaban 84% de su actividad, según el veredicto de liquidación judicial del tribunal de comercio de Tolón (sur de Francia).
Entre sus mejores mercados figuraba Sudamérica, especialmente Venezuela, Brasil, Colombia y Argentina, con más de 58% de las exportaciones en 2007 y 50% en 2009.
En Gran Bretaña, unas 250 mujeres entablaron una acción judicial después de que al menos la mitad de ellas tuvieran problemas con las prótesis de mama fabricadas por PIP.