Ministro británico de Cultura no quiere "austeridad" en los Juegos Olímpicos

LONDRES.- El ministro británico de Cultura, Jeremy Hunt, considera que los Juegos Olímpicos que Londres organiza este verano no deberían ser "austeros" y que el Gobierno tiene que "aprovechar al máximo" la oportunidad que brinda este evento.

En declaraciones que publica hoy el diario británico "Daily Telegraph", Hunt se ha mostrado contrario a los que piden que reine la austeridad en estos momentos de crisis económica en la organización del esperado evento olímpico.

Según este titular, los votantes no perdonarían al Ejecutivo si fracasara en la puesta en escena de los JJOO.

El Gobierno de coalición ha destinado un presupuesto de 9.300 millones de libras (unos 11.000 millones de euros) para los Juegos, una cantidad que supera a la inicial estimada cuando la capital británica ganó la candidatura en 2005, que entonces se fijó en 2.400 millones de libras (unos 2.800 millones de euros).

"Se pueden adoptar dos actitudes de cara a los Juegos Olímpicos. Podemos decir: vivimos tiempos de austeridad y por ello debemos recortarlos lo más que podamos. O podemos decir: porque son tiempos de austeridad, tenemos que hacer todo lo posible para aprovechar la oportunidad de los JJOO", razonó el ministro.

Hunt consideró que organizar este evento tendrá un "impacto enormemente positivo" para impulsar la confianza económica.

"Vamos a ser el centro de la atención global y será la primera vez que tengamos un evento deportivo de esta importancia que va a ver en directo más de la mitad de la población mundial", afirmó.

Además, añadió que los ciudadanos no "perdonarían" al Gobierno "si no aprovecháramos al máximo este momento".

"Los JJOO constituirán una expresión increíble de la cultura británica, de la historia británica y la creatividad británica, por lo que hemos decidido que lo sensato es asegurarnos de que se financian adecuadamente", agregó.

El Ejecutivo aumentó recientemente en más del doble el presupuesto destinado a las ceremonias olímpicas y paralímpicas, que incrementó de 40 a 81 millones de libras (de 47,9 a 95,8 millones de euros), después de que Cameron viera los planes.

El Gobierno también incrementó los fondos para la seguridad de las instalaciones olímpicas, que subieron de 271 a 553 millones de libras (de 324 a 662 millones de euros).