PYONGYANG.- Corea del Norte celebró ayer la primera reunión de Gabinete bajo el mando del nuevo “líder supremo” Kim Jong-un, en la que analizaron la situación económica del hermético régimen comunista, según informan hoy los medios surcoreanos.
En esta primera sesión plenaria se revisaron las cuentas del pasado ejercicio y planificaron las estrategias económicas y los objetivos para este año, según detalló la agencia estatal norcoreana KCNA en un despacho recogido por la agencia surcoreana Yonhap.
En 2012 el Gabinete norcoreano acordó dar prioridad al desarrollo de la industria ligera y la agricultura del país, según confirmó en el despacho el primer ministro de régimen, Choe Yong-rim. El análisis gubernamental de la situación económica de Corea del Norte se realiza cuatro veces al año y es el primero desde que el nuevo “líder supremo” norcoreano asumiera el cargo tras la muerte de su padre Kim Jong-il, el pasado 17 de diciembre, que lideró el régimen comunista con mano de hierro durante diecisiete años.
Los años de aislamiento, la mala gestión y los desastres naturales han sumido a Corea del Norte en una permanente crisis económica desde los años 90, que se plasma en la escasez crónica de alimentos y energía, y la dependencia de la ayuda internacional para alimentar a sus más de 20 millones de ciudadanos.
Según un informe publicado en noviembre de 2011 por el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), prácticamente uno de cada cinco niños (el 19 %) sufre de malnutrición moderada en Corea del Norte y el 4 % está gravemente mal alimentado y bajo de peso. Además, uno de cada tres niños sufre de un déficit de crecimiento en el país comunista, con una tasa que casi se duplica en las zonas rurales, donde esta condición afecta al 45 % de menores, frente al 23 % en las ciudades.
En términos de mortalidad, 11.400 niños norcoreanos mueren cada año antes de cumplir los cinco años, mientras que un cuarto de las mujeres entre los 15 y 49 años sufre malnutrición, lo que las coloca en riesgo significativo de dar a luz bebés con peso insuficiente, según indica el informe.
Expertos de Corea del Sur creen que el régimen de Pyonyang reserva los alimentos enviados como ayuda humanitaria para las celebraciones previstas para conmemorar, en abril de 2012, el centenario del nacimiento del fundador del país, Kim Il-sung.