JERUSALÉN.- El Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reconoció hoy que las "señales" de reanudación del diálogo de paz con los palestinos "no son especialmente buenas", tras el fracaso de los contactos en Ammán para acercar a las partes.
"Espero que ellos (los palestinos) den marcha atrás y continúen con las conversaciones para que podamos avanzar hacia una auténtica negociación", dijo Netanyahu al inicio de la reunión del consejo de ministros en Jerusalén, según la transcripción de sus palabras difundida por su oficina.
El jefe del Ejecutivo aludió al episodio protagonizado por los jefes de los respectivos equipos negociadores, el israelí Itzjak Moljo y el palestino Saeb Erekat, en uno de sus últimos encuentros, el pasado día 21, del que informó entonces el diario "Haaretz".
Ambos se enzarzaron en una dura discusión cuando Erekat se negó a que un invitado inesperado de Moljo, el brigadier general Asaf Orion, hablara sobre los acuerdos de seguridad sin que el equipo israelí presentara antes su posición sobre las futuras fronteras de sus respectivos Estados, algo que sí habían hecho los palestinos.
"Hasta ahora los palestinos han rechazado incluso discutir con nosotros sobre las necesidades de seguridad del Estado de Israel", señaló hoy Netanyahu ante sus ministros.
Los contactos en Ammán han quedado en punto muerto desde el 26 de enero, cuando se cumplió el plazo de tres meses dado por el Cuarteto de Medio Oriente (EE.UU., la UE, la ONU y Rusia) para que las partes presentasen sus posiciones sobre fronteras y mecanismos de seguridad.
Los palestinos lo hicieron, mientras que Israel entregó una carta con 21 puntos que negociar y sin propuestas concretas sobre los dos asuntos clave, con la que todo el Parlamento del país "estaría de acuerdo", conforme a la descripción que hizo entonces Netanyahu.
El objetivo de los encuentros, celebrados bajo la mediación de Jordania y amparados en una declaración en septiembre del Cuarteto, era crear las condiciones para que israelíes y palestinos retomasen el diálogo directo de paz, paralizado desde septiembre de 2010, apenas tres semanas de su inicio.
Israel considera que el plazo de tres meses fijado por el Cuarteto se debe empezar a contabilizar a partir del reinicio de los contactos preliminares, por lo que aún quedarían otros dos meses.
Aunque Israel insiste en reiniciar el proceso de paz cuanto antes, los palestinos rechazan una y otra vez hacerlo sin que se detenga la ampliación de las colonias judías en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén Este.
Se espera que el próximo 4 de febrero, el presidente palestino, Mahmoud Abbas, trate la situación de las negociaciones ante la Liga Árabe para decidir los próximos pasos.
Un día antes de que se cumpliera el plazo, Abás dijo que las conversaciones con Israel en Ammán "han reavivado las esperanzas" de poder reanudar las negociaciones directas, aunque no hay aún fecha para un próximo encuentro.