BUENOS AIRES.- El Gobierno argentino anunció hoy que se presentará como querellante particular para "defender el interés público" en la causa abierta para determinar responsabilidades por el accidente de tren que causó 50 muertos y más de 700 heridos el miércoles en Buenos Aires.
"Acá no se generan esquemas de protección para nadie. Vamos a avanzar y a tomar la medidas que hagan falta en el marco de la justicia y la investigación judicial, todo dentro de la ley", dijo el ministro de Planificación, Julio De Vido.
El ministro confirmó que concluyó el proceso de identificación del medio centenar de víctimas mortales del accidente, que tuvo lugar en la estación de Once debido, al parecer, a un fallo de los frenos.
El funcionario explicó que, después de que se haga pública la decisión de la justicia, el Gobierno tomará las medidas administrativas que considere oportunas.
"De ninguna manera vamos a tomar desde el punto de vista administrativo acciones que estén descontextualizadas del accionar de la justicia", agregó De Vido, cuya comparecencia había desatado intensos rumores sobre la posibilidad de que el Gobierno decidiera revocar a la empresa TBA la concesión de la línea de tren en la que se produjo el accidente.
Por su parte, el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, que en las últimas horas fue blanco de duras críticas, subrayó que el Gobierno de Cristina Fernández asume "la responsabilidad que implica todo lo que corresponda, pero, en primer lugar, la responsabilidad que significa lleva a cabo una investigación en profundidad, apoyando a la justicia".
Lejos de analizar en profundidad el estado del servicio de transporte colectivo, en su primera comparecencia ante la prensa tras el accidente, Schiavi hizo comentarios el miércoles que causaron malestar.
Entre otra cosas dijo que si el siniestro se hubiera producido en un día festivo no habría pasado a mayores y que la tragedia fue más grave por la "costumbre" de los argentinos de viajar en los primeros vagones.