TOKIO.- El ministerio nipón de Medioambiente ha detectado altos niveles de radiación en los municipios de la zona de evacuación decretada en torno a la central de Fukushima, epicentro de la crisis nuclear, informó hoy la agencia local Kyodo.
Según los resultados de las pruebas recogidas entre el 7 de noviembre y el 16 de enero, los mayores y menores niveles de radiación fueron detectado en la ciudad de Futaba, a unos 19 kilómetros de la planta, con lecturas en dos puntos concretos de 470 y 5,8 milisievert anuales, respectivamente.
El Gobierno japonés estableció una zona de evacuación de 20 kilómetros alrededor de la central de Fukushima Daiichi por el temor a los efectos de alta radiactividad en la población.
Además, según el informe preliminar presentado ayer por el Ministerio, en muchos puntos al norte y noroeste de la accidentada central se presentaron niveles de hasta 50 milisievert anuales.
El Gobierno nipón establece el límite de 50 milisievert anuales para las zonas declaradas inhabitables por alta radiación, mientras que aquellas con niveles entre 20 y 50 milisievert anuales son zonas de riesgo y las de menos de 20 son áreas en las que los residentes pueden regresar gradualmente a sus domicilios.
Se espera que el Ministerio de Medioambiente emita un informe completo a finales de marzo, con datos que el Gobierno utilizará para poder reclasificar en abril las zonas de evacuación de acuerdo a las lecturas registradas, detalló Kyodo.
A su vez, también se detectaron niveles altos de cesio radiactivo en cenizas y leña de casas de ocho localizaciones de las provincias de Miyagi, la provincia más afectadas por el seísmo del 11 de marzo, Fukushima e Ibaraki.
En la ciudad de Minamisoma, en la provincia de Fukushima, se llegaron a detectar hasta 240.000 becquereles de cesio radiactivo por kilo, mientras que en Kawamata, también en Fukushima, se alcanzaron los 163.000 becquereles.
El Gobierno determina que los residuos con niveles superiores a los 100.000 becquereles por kilo se deben almacenar en contenedores sellados, mientras que los de menos de 8.000 becquereles por kilo pueden ser tratados como basura normal.
El terremoto y el tsunami que el 11 de marzo del año pasado asolaron el noreste del país dieron lugar a la peor crisis nuclear de los últimos 25 años en la planta de Fukushima Daiichi, cuyas emisiones radiactivas han obligado a evacuar a unos 80.000 habitantes y afectado gravemente a la agricultura, la ganadería y la pesca local.