PARÍS.- El candidato socialista francés a las elecciones presidenciales, François Hollande, dijo hoy con ironía que si gana su primera visita será a la canciller alemana, Angela Merkel, "que espera recibirme".
Así contestó Hollande, en una larga entrevista a la emisora de radio "Europe 1", a la pregunta de dónde hará su primer viaje si resulta elegido presidente tras elecciones del 22 de abril y 6 de mayo.
La revista alemana "Der Spiegel" publicó esta semana que Merkel ha hecho un pacto con jefes de gobierno conservadores para no recibir a Hollande.
El candidato socialista francés subrayó que si llega a la jefatura del Estado tiene intención de revisar el nuevo tratado europeo, que está pendiente de ratificación, porque aunque acepta la parte sobre las reglas de disciplina presupuestaria, quiere añadir una pata para reactivar la actividad económica.
Ante los micrófonos de "Europe 1", Hollande, favorito de los sondeos, avanzó que si llega a ser presidente el gasto público francés aumentará a un ritmo del 1 % anual, mientras los impuestos lo harán con la cadencia prevista en las cuentas presentadas por el actual Gobierno francés a las autoridades europeas, pero las subidas gravarán sobre todo a los más ricos.
Defendió su propuesta de una tasa del 75 % en el impuesto sobre la renta para los que ganan más de un millón de euros al año, frente a las críticas que ha recibido porque eso podría afectar negativamente a la competitividad de los clubes de fútbol franceses, que tendrán más dificultades para fichar a grandes jugadores.
"Ha habido una inflación salarial considerable y no siempre los clubes más ricos son los que ganan", replicó Hollande, que consideró que "hace falta una moralización en el fútbol y en el mundo económico", y que en una situación de crisis como la actual "cuando se pide un esfuerzo, todos deben esforzarse, y en primer lugar los que más ganan".
Frente a la iniciativa presentada anoche por Sarkozy de crear un nuevo impuesto sobre los beneficios mundiales a las grandes empresas francesas, el líder socialista reiteró que impondrá tres tipos diferentes en el impuesto de sociedades: el 15 % para las pequeñas empresas, el 30 % para las medianas y el 35 % para las grandes.