LA PAZ.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, admitió hoy el deterioro de su salud por mala alimentación y desgaste físico acumulado en seis años de gobierno.
A comienzos de mes Morales fue internado por dos días en una clínica privada de la ciudad de Cochabamba, centro de Bolivia.
El ex ministro de Salud Pública Guillermo Cuentas sostuvo que Morales adolece de "síndrome de fatiga crónica" porque trabaja unas 20 horas al día.
Según lo informado por los medios, la actividad diaria del presidente se inicia a las cinco de la madrugada con reuniones en la residencia de San Jorge o el Palacio Quemado. Luego realiza de dos a tres viajes por día a diferentes regiones de Bolivia a distintas alturas, desde 250 a 4.100 metros.
Morales, de 52 años, fue sometido a cirugías en varias ocasiones. La primera fue por vesícula biliar hace diez años y después fue operado de las rodillas y por problemas en la nariz.