El presidente colombiano Juan Manuel Santos.
EFEBOGOTÁ.- El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, agradeció este sábado a las autoridades de Ecuador la captura de Juan Carlos Calle, hermano de Luis Enrique y Javier Antonio Calle, acusados de ser los máximos jefes de la banda narcoparamilitar de Los Rastrojos.
El sujeto fue capturado este viernes en Quito, donde vivía hace cinco años y se dedicaba al blanqueo de capitales y a hacer contactos en Brasil y Perú para el tráfico de cocaína de Los Rastrojos hacia Estados Unidos, según la Policía colombiana.
Luis Enrique y Javier Antonio Calle son conocidos con el alias común de "Los Comba" y son considerados como dos de los delincuentes más buscados de Colombia.
El gobierno colombiano ofrece una recompensa de 5.000 millones de pesos (unos 2,8 millones de dólares) por datos que conduzcan a la detención de los hermanos Calle.
"'Los Comba' son esos hermanos que han generado tanta violencia. Hay dos famosos. Hay un tercero que también tiene orden de captura, que también pertenece a esa organización. Estábamos detrás de él y gracias a la colaboración de las autoridades ecuatorianas con nuestra Policía, ayer pudimos capturar a este individuo", dijo Santos.
Por su parte, el director de la Policía colombiana, general Óscar Naranjo, dijo que Calle, alias "Armando", se hacía pasar en Ecuador como empresario y portaba documentos de identificación de ese país.
"Ese individuo, siendo a su vez el menos visible de sus hermanos en Colombia, ya está condenado en el país por autoridades colombianas por concierto para delinquir, y por lo tanto someterlo a la justicia colombiana resultaba un verdadero imperativo", dijo Naranjo.
Según los organismos de seguridad, Los Rastrojos tienen vínculos con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el cartel mexicano de Sinaloa.
Desde finales del año pasado han circulado versiones de prensa en el sentido de que Luis Enrique y Javier Antonio Calle están en contactos con la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) para entregarse a cambio de protección para sus familiares.
Una publicación del diario "El Tiempo" señalaba en ese entonces que, además de entregarse, "Los Comba" ofrecían poner a disposición de la DEA a otro "pez gordo" del narcotráfico en Colombia, Daniel Barrera, alias "El Loco", aunque se desconocía si este último se entregaría voluntariamente o sería víctima de una delación.