KABUL.- Un soldado de la OTAN, siete policías afganos y un traductor murieron víctimas de la explosión de un artefacto registrada en el sur de Afganistán.
El ataque ocurrió este sábado por la noche en el distrito de Arghandab, situado en la conflictiva provincia de Kandahar, informó el gobernador distrital, Shah Mohammad Ahmadi, quien precisó que el artefacto fue detonado por control remoto.
Las víctimas, que participaban en tareas de patrulla conjunta en el pueblo de Kohak, son un soldado de la misión de la OTAN en Afganistán (ISAF), cuatro policías locales, tres policías nacionales afganos, y un traductor, detalló Ahmadi.
El ataque fue reivindicado en declaraciones por un portavoz talibán, Mohamed Yousif Ahmadi, mientras que otro miembro de la sección de prensa de la ISAF se limitó a confirmar que se había producido la explosión, sin proporcionar más detalles.
Este tipo de ataques son frecuentes entre los muyahidines talibanes, que luchan por implantar en Afganistán un régimen fundamentalista islámico y lograr la salida inmediata de todas las tropas extranjeras desplegadas en el país.