TOKIO.- Japón ha fijado normas de seguridad más estrictas y transparentes para las plantas atómicas para aliviar las preocupaciones de la ciudadanía, antes de reencender dos reactores nucleares por primera vez desde el sismo y maremoto de marzo de 2011.
El gobierno desea poner en funcionamiento de nuevo ambos reactores antes de apagar en mayo el último reactor en funcionamiento del país.
Sin embargo, el gobierno ha enfrentado una firme oposición de la ciudadanía en tanto que las autoridades locales son renuentes a dar su autorización por temor a un reacción adversa del público.
Las autoridades señalan que los nuevos lineamientos de seguridad son más amplios que las anteriores "pruebas de resistencia" efectuadas en simuladores computarizados y con las que se pretendía mostrar la seguridad de los reactores frente a sismos poderosos y maremotos.
Las autoridades expresaron confianza en que las empresas eléctricas muestren capacidad para cumplir las nuevas normas a fin de convencer a la ciudadanía de que es seguro el funcionamiento de los reactores atómicos.