AP (imagen de archivo)
SEÚL.- Un día después de que se abrió la "ventana" de tiempo dispuesta para ese fin, Corea del Norte lanzó el cohete cuyo despegue que había mantenido en vilo a varios países de Asia. No obstante, el aparato se habría desintegrado, según señaló en las últimas horas el gobierno de Corea del Sur.
Una información de la agencia Yonhap que cita al portavoz del Ministerio de Defensa surcoreano, Kim Min-seook, precisa que el proyectil Unha-3 aparentemente se dividió en varios trozos luego de despegar desde la base de lanzamiento de Tongchang-ri.
Pocos minutos después, los restos cayeron al mar, aseguró el vocero.
"Corea del Sur y las autoridades de inteligencia estadounidenses creen que el lanzamiento del misil de Corea del Norte finalizó en un fracaso", indicó Kim, que no ofreció detalles sobre en cuál de las tres etapas del proyectil se pudo producir el desperfecto.
"Provocación"
La Casa Blanca confirmó en un comunicado el fallido lanzamiento del misil norcoreano y tildó la acción del régimen de Pyongyang de "provocación que amenaza la seguridad regional". Añadió que la acción constituye una violación de la ley internacional.
La nota constató que el lanzamiento fue un arma y no un satélite de observación, como asegura Corea del Norte. De acuerdo al diagnóstico realizado por el Comando de la Defensa Aérea de EE.UU. (NORAD), el proyectil era un Taepodong-2, misil balístico intercontinental que tiene un alcance de entre 6.000 y 9.000 kilómetros.
"Pese a que esta acción no nos sorprende, dado el patrón de comportamiento agresivo de Corea del Norte, cualquier actividad de misiles norcoreana es una preocupación para la comunidad internacional,” indica el comunicado.
Añadió que el régimen comunista de ese país "no hace más que aumentar su aislamiento lanzándose en actos de provocación y gasta su dinero en armas y propaganda mientras que los norcoreanos tienen cada vez más hambre".
Medidas de seguridad
La información sobre el despegue había sido entregada por el portavoz del ministerio de Defensa surcoreano, Kim Min-seok. El disparo ocurrió alrededor de las 7:39 horas del viernes (19:39 del jueves en Chile).
Tras la noticia, las Fuerzas de Autodefensa de Japón activaron medidas para detectar al aparato mediante el despliegue de navíos de combate dotados con dispositivos AEGIS. Los sistemas antimisiles "Patriot" desplegados en Tokio y otras ciudades entraron en condición operativa.
También fueron alertados los aviones cuyas rutas de vuelo se encuentran dentro de la zona de vuelo del aparato norcoreano. Todas las alertas fueron levantadas luego de que se comprobó el corto vuelo del amenazante proyectil.
Advertencia del G8
Poco antes del despegue, los ministros de Relaciones Exteriores del G8 habían pedido a Norcorea que no lleve a cabo el anunciado despegue de un cohete que supuestamente pondría un satélite en órbita.
En un comunicado, los ministros pidieron "que (Corea del Norte) no lleve a cabo el lanzamiento", lo que supondría una "seria violación" de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
La operación, que es calificada como "pacífica" y con fines científicos por el régimen de Corea del Norte, es rechazada por países occidentales y de Asia debido a la posibilidad que encubra la prueba de un misil militar de largo alcance.
La tensión por el despegue del artefacto incluyó advertencias a la población civil para que no salga de sus casas y advertencias a aviones cuyas rutas de vuelo crucen la trayectoria prevista del satélite.
Condena global
El Gobierno de Alemania condenó esta tarde el lanzamiento del cohete. El ministro de Relaciones Exteriores, Guido Westerwelle, exigió al Consejo de Seguridad de la ONU una "fuerte" respuesta a la acción.
"Condeno el lanzamiento de un cohete de Corea del Norte. Es una violación de las obligaciones internacionales y aumentará las tensiones en la península coreana", declaró, durante una visita a Nueva York.
Los gobiernos de Australia y Nueva Zelandia también manifestaron su repulsa a la acción norcoreana y exigieron a ese país que respete las resoluciones de la ONU.
Japón, en tanto, afirmó que estudia nuevas sanciones contra Pyongyang luego de lo que calificó como un "grave acto de provocación".
Corea del Sur calificó de la misma manera el incidente y anunció que pedirá al Consejo de Seguridad de la ONU, que se reunirá este viernes para analizar el caso, que adopte una respuesta "firme y unificada" frente a su vecino norteño.
El gobierno de Perú, en tanto, manifestó su "inquietud" por el lanzamiento norcoreano e instó al régimen de ese país a retomar el diálogo para la desnuclearización de la península.