Un ciudadano surcoreano observa los reportes de TV emitidos en Seúl sobre el fallido despegue.
Reuters
PYONYANG.- En un nada frecuente reconocimiento de sus fracasos, el régimen de Corea del Norte asumió hoy el desastre experimentado por el cohete que lanzó este viernes (jueves en Chile) desde una base situada al norte del país.
El anuncio fue entregado por la agencia oficial KCNA, que insistió en que el intento fue una operación pacífica para poner un satélite en órbita, lo que fue desestimado por Estados Unidos.
"La República Popular Democrática de Corea (RPDC) lanzó su satélite Kwangmyongsong-3 (..) a las 07h38m55s del viernes. El satélite de observación terrestre no pudo entrar en órbita", reconoció KCNA.
"Los científicos, técnicos y expertos están estudiando las razones de este fracaso", puntualizó.
Esta es la primera vez que el régimen comunista hace un reconocimiento de este tipo en torno a sus ensayos "espaciales". En dos supuestos lanzamientos de satélites emprendidos anteriormente por Corea del Norte, en 1998 y 2009, las autoridades de ese país habían comunicado el "éxito" en la puesta en órbita de los aparatos.
No obstante, ninguna de las agencias espaciales internacionales pudo detectar jamás a los alegados satélites en torno a la Tierra.
Partido en veinte pedazos
Autoridades de Corea del Sur habían confirmado que el proyectil se desintegró en varios trozos poco después del despegue desde la base de Tongchang-ri.
El cohete, de 91 toneladas y una longitud de 30 metros, se habría precipitado en el mar a una distancia de entre 100 y 150 kilómetros de la ciudad portuaria surcoreana de Gunsan, al oeste del país.
La falla se relacionaría con un problema en la separación de la primera etapa del proyectil, según analistas surcoreanos. Una autoridad militar precisó que el artefacto se desmembró en unas 20 piezas tras alcanzar una altitud máxima aproximada de 151 kilómetros.
Este viernes, la marina de Corea del Sur anunció que iniciará un operativo en sus aguas para tratar de ubicar los fragmentos del aparato. "Hemos localizado el lugar donde cayeron los restos y estamos tratando de recuperarlos", declaró un portavoz del estado mayor naval.
Especialistas del Comando de Defensa Aérea de Estados Unidos (NORAD), en tanto, afirmaron que el artefacto lanzado el viernes era en realidad un misil Taepodong-2, que tiene propósito militar y es capaz de alcanzar blancos situados a entre 6.000 y 9.000 km.