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MADRID.- El rey Juan Carlos I de España permanecerá "cuatro o cinco días" ingresado en el hospital de Madrid donde esta madrugada fue operado de una fractura en la cadera, y en unos diez podrá incorporarse a su despacho, informó este sábado el doctor Ángel Villamor, jefe del equipo que intervino al monarca.
En una comparecencia informativa para explicar detalles de la operación, Villamor precisó que el rey podrá realizar todo tipo de actividad física en "uno o dos meses", y que la caída accidental que le provocó la rotura se produjo al bajar un escalón durante un viaje privado a Botswana.
El rey se recupera en una habitación del hospital USP San José de la intervención quirúrgica a la que fue sometido durante unas dos horas y cuarto, tras fracturarse en tres fragmentos la cadera derecha, afectada a su vez de artrosis, lo que requirió una reconstrucción de la zona afectada y la colocación de una prótesis.
La caída que provocó la rotura de la cadera se produjo en la madrugada del jueves al viernes, cuando tropezó con un escalón en la residencia donde se encontraba alojado, tras lo que fue atendido por el médico de la Casa del Rey que le acompañaba.
En un viaje que duró unas diez horas, el monarca fue trasladado a Madrid en el mismo avión privado con el que se trasladó a Botswana la víspera e ingresó en el hospital, donde fue intervenido.
Villamor precisó que, durante el trayecto desde Botsuana a España, el monarca español viajó sentado y recibió analgésicos que le evitaron sufrir dolores.
El médico consideró "muy satisfactorio" el resultado de la intervención, tras la que el rey se mantuvo en observación unas ocho horas, e indicó que hoy mismo empezará a ponerse en pie con muletas para unos primeros ejercicios de rehabilitación.
Esta es la octava vez que el rey Juan Carlos I, jefe del Estado español desde 1975, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.
El 4 de septiembre de 2011, ingresó en la misma clínica para someterse a una cirugía por la rotura del tendón de aquiles, y unos meses antes, el 3 de junio, se le implantó una prótesis en la rodilla derecha.
El 8 de mayo de 2010, se le extrajo un nódulo pulmonar, cuyo posterior estudio permitió descartar la existencia de células malignas.
Entre 1985 y 2001 el rey de España fue operado en otras cuatro ocasiones, tres de ellas relacionadas con el esquí, uno de sus deportes favoritos.