AFP
BUENOS AIRES.- El vicepresidente argentino, Amado Boudou, afirmó este sábado que el gobierno de Cristina Kirchner no teme represalias de España por la decisión de expropiar el 51% de las acciones de la petrolera YPF, todas ellas pertenecientes a la española Repsol.
"No vamos a dejar que nos callen, no tenemos miedo y porque no tenemos miedo la presidenta nos volvió a dar una empresa energética: YPF", dijo Boudou al inaugurar un puesto del gobierno en la Feria del Libro en Buenos Aires.
Argentina anunció el lunes pasado la expropiación del 51% de las acciones de YPF, todas ellas pertenecientes al 57,4% controlado por la española Repsol, que según el gobierno no cumplió con sus compromisos de inversión en el país.
El gobierno español respondió con el anuncio de una reducción de la compra de biodiésel argentino, producto que tiene a Argentina como uno de los principales proveedores del mundo.
"Las decisiones de la República se toman en la Casa Rosada (sede gubernamental) y son para el conjunto de los argentinos", dijo Boudou junto al jefe de ministros Juan Manuel Abal Medina y la ministra de Industria, Debora Giorgi.
La presidenta Kirchner había respondido el viernes con ironía a la represalia española y consideró que Argentina, que produce 3 millones de toneladas anuales de biodiésel, no tendrá dificultades en absorber las 400.000 toneladas que compraba el país europeo.
"Si el gobierno de España quiere pagar más caro el biocombustible es una decisión soberana", sostuvo la mandataria.
La relación entre Argentina y España se resintió tras la decisión de Kirchner de intervenir YPF y enviar al Congreso un proyecto de ley para expropiar el 51% de las acciones de la petrolera.
España recibió el apoyo de Estados Unidos, la Unión Europea y las principales entidades financieras internacionales.