PARÍS.- El candidato socialista a la Presidencia francesa, François Hollande, acusó este miércoles a su rival en la segunda vuelta del próximo 6 de mayo, Nicolas Sarkozy, de haber "derechizado" su discurso para atraer el voto del ultraderechista Frente Nacional (FN), cuya candidata fue tercera en la primera ronda.
"Pretende seducir incluso a los dirigentes de la extrema derecha. Me parece que se pasa. Cada uno hace campaña como quiere, pero creo que la próxima Presidencia debe ser para unir, no para dividir", afirmó Hollande en la televisión pública "France 2".
El candidato socialista aseguró que no tiene intención de cambiar su discurso y afirmó que el presidente Sarkozy se comporta como "una veleta" que cambia de ideas en función de los acontecimientos.
Hollande afirmó entender las quejas de los electores que sufragaron por la ultraderechista Marine Le Pen en la primera vuelta del pasado domingo, cuando logró casi el 18 % de los votos, el mejor resultado de la extrema derecha.
El candidato socialista acusó a Sarkozy de haber presionado a empresarios franceses para que retrasen sus planes de despidos para después de las presidenciales.
Hollande envió también un mensaje a los electores del centrista François Bayrou, a quienes afirmó que pondrá en marcha sus planes de "moralización" de la vida política, los cuales incluyen una iniciativa que introducirá la mayoría reforzada en el Parlamento para la adopción de grandes medidas, una ley para evitar la acumulación de cargos públicos y la inclusión de proporcionalidad en el sistema mayoritario del legislativo francés, entre otras.
Hollande acusó a Sarkozy también de querer "dividir" a los trabajadores al haber convocado una manifestación paralela a la de los sindicatos para el próximo 1 de mayo, luego de que el presidente saliente convocó para ese día una manifestación por el "auténtico trabajo".
"¿Quiere eso decir que hay un trabajo falso? Sarkozy siempre busca dividir. Yo creo que el 1 de mayo es una fiesta para reunir a los trabajadores, reconciliar a todos los que quieren un trabajo con dignidad y bien remunerado", afirmó.