GINEBRA.- Las Naciones Unidas aseguraron que al menos un millón y medio de civiles en Siria necesitan ayuda humanitaria urgente, pero el acceso a ellos es restringido por el recrudecimiento del conflicto, mientras sigue aumentando el número de desplazados internos.
La inseguridad que vive el país explica que sólo unas 461.000 personas se hayan beneficiado hasta ahora de la llegada de suministros del Programa Mundial de Alimentos, según el organismo internacional.
Además, unos 92.000 refugiados sirios están recibiendo algún tipo de ayuda en países vecinos.
Las misiones de reconocimiento enviadas por la ONU a Siria para examinar la futura presencia de esta organización concluyeron su trabajo, pero el despliegue del personal es difícil por el aumento de la violencia, señaló la Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU.