LIMA.- El hermano mayor del presidente peruano Ollanta Humala, Ulises Humala, aseguró hoy que su familia se ha convertido en la única oposición al mandatario.
"Este gobierno no tiene oposición política. El Partido Aprista (del ex presidente Alan García), lo apoya de alguna manera; Fujimori lo apoya de alguna manera; los medios de comunicación que lo atacaban ahora son los que lo defienden", dijo Ulises Humala en la radio RPP. "Al final, parece que los únicos que tienen una posición crítica somos la familia", añadió.
Ulises Humala, ex candidato presidencial de 53 años, hizo los comentarios al ser interrogado sobre un extenso reportaje de la revista británica "Time" que menciona las malas relaciones del presidente con su padre y sus hermanos.
"No estamos acá perjudicando la gestión del presidente por escándalos de orden judicial o económico. Tenemos nuestras ideas y tenemos el derecho de expresarlas", advirtió Humala, quien aseguró que la oposición no obedece a razones personales sino políticas.
El jefe de Estado tiene mala relación con sus padres y sus cinco hermanos, varios de los cuales han hecho pública su oposición. El caso más resaltante es el de su hermano Antauro, que paga desde 2005 una pena de 19 años por cuatro asesinatos derivados de la toma de una comisaría policial y a quien el actual gobierno le impuso las condiciones carcelarias más drásticas.
"Mi hermano nunca ha estado en peores condiciones que ahora. Él ha estado preso en los gobiernos de (Alejandro) Toledo y García, pero los peores momentos son los actuales cuando se podría pensar que sean los menos difíciles por el hecho de tener al hermano en el poder", dijo Ulises.
En ese marco, Ulises rechazó las críticas de quienes dicen que la familia debería ser el primer apoyo del presidente: "No entiendo esa lógica. ¿El hecho de ser un familiar directo tiene que significar un apoyo incondicional? ¿Por qué no se aplica en el sentido contrario? ¿por qué él no le da apoyo incondicional a Antauro?".
Ulises Humala reconoció que la situación política fracturó la unidad familiar y que el presidente ya no participa en las reuniones habituales que solían tener padres y hermanos.