Siria: Gobierno y oposición cometen "graves" violaciones de DD.HH

Pillay volvió a instar a los 15 miembros del Consejo de Seguridad a que remitan el conflicto sirio a la Corte Penal Internacional (CPI), pero admitió que la decisión última al respecto sería de carácter "político".

Rusia, aliado clave de Siria, ha bloqueado los intentos anteriores para imponer sanciones y derivar el caso sirio a la CPI. Pillay dijo al consejo que el conflicto, ahora en su decimosexto mes, era "cada vez más interreligioso", según un texto con sus comentarios obtenido por la AFP.

Explicó que cientos de personas siguen atrapadas en Deir Ezzor y en el distrito de la antigua ciudad de Homs "por la creciente utilización de armamento pesado, de artillería y de escaramuzas armadas".

La alta comisionada denuncio además que el suministro de armamento al gobierno sirio y a sus opositores es la causa de la escalada de la violencia en el conflicto.

"La provisión de armas al gobierno sirio y a sus opositores está alimentando la violencia", señaló la alta comisionada. "Cualquier militarización del conflicto debe ser evitada a toda costa", añadió.

Pillay no se refirió a ningún país en particular, aunque Rusia e Irán son los principales proveedores de armas del gobierno del presidente Bashar al Asad, mientras que los países del Golfo, especialmente Qatar y Arabia Saudí, se han declarado listos para suministrarle equipos a la oposición armada.