MOSCÚ.- El gobernador de la región meridional rusa de Krasnodar, Alexandr Tkachov, destituyó hoy jefe de la provincia de Krimsk, Vasili Krutkó, por no haber alertado a tiempo a la población sobre las graves inundaciones registradas, en las que han perdido la vida al menos 171 personas.
"Está demostrado que la jefatura de la provincia fue advertida con una antelación de tres horas, como mínimo, de la amenaza de inundación", indicó Tkachov, según la página web de la Administración de Krasnodar.
El gobernador agregó que, pese a esas circunstancias, en las reuniones que mantuvo el sábado y el domingo con habitantes de la ciudad de Krimsk, situada en provincia homónima, éstos le manifestaron que no recibieron ningún aviso de las autoridades.
Al frente de la provincia de Krimsk fue nombrado provisionalmente Alexandr Vasiliev, quien hasta ahora se despeñaba como jefe de otra provincia de Krasnodar.
Aunque Tkachov indicó la necesidad de destituir también al jefe de la administración de la ciudad de Krimsk, Vladimir Ulanovski, hasta el momento no se ha tomado ninguna decisión al respecto, dijeron a Efe fuentes de la oficina de prensa de la administración de Krasnodar.
Un total de 185 personas, de ellas 23 niños, tuvieron que ser hospitalizadas a consecuencia del desastre, que dejó cerca de 35.000 damnificados, según los últimos datos del Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia.
Entretanto, los servicios de rescate buscan desaparecidos en la zona de las inundaciones que arrasaron miles de viviendas.
"Estamos trabajando sobre cada una de las denuncias de desaparecidos. Buscamos a la gente. No puedo precisar el número de las denuncias, pero son bastantes", señaló Serguéi Miroshnichenko, un alto cargo del Ministerio de Emergencia.
Habitantes de Krimsk han denunciado que la ciudad fue arrasada por una ola de más de siete metros, que según ellos pudo deberse al desbordamiento de la presa de Neberdzháyevsk, situada en una montaña sobre la ciudad, pero las autoridades volvieron hoy a descartar tal versión.
"Las causas de la catástrofe residen, a primera vista, solo en las precipitaciones. No vemos una causa técnica, aunque continúa la investigación", dijo a la agencia Interfax el jefe de la Agencia federal de Recursos Hidrológicos rusa, Vadim Nikanórov.
Las autoridades han reconocido que la presa de Neberdzháyevsk se desbordó varias veces durante las lluvias torrenciales pero descartaron que estos "vertidos ordinarios" fueran la causa de las inundaciones.