TOKIO.- El ministro de Defensa japonés, Satoshi Morimoto, advirtió este viernes que Tokio podría enviar tropas a un archipiélago en el Mar de China Meridional en litigio con China, si las circunstancias así lo exigiesen.
El secretario de Estado dijo que la posición nipona no había variado en cuanto a este litigio, pero que usaría la fuerza para defender las disputadas islas llamadas Senkaku por los japoneses y Diaoyu por los chinos.
"La defensa de las islas corresponde principalmente a los guardacostas y a la policía", aunque "la ley estipula que las Fuerzas de autodefensa (el Ejército japonés) pueden actuar" por orden del Primer Ministro si la primeras no pueden controlar la situación, precisó Morimoto.
En la víspera, el Premier, Yoshihiko Noda, afirmó al Parlamento estar dispuesto a efectuar "acciones enérgicas" en caso de invasión de las islas por las fuerzas chinas.
"Si países vecinos emprenden acciones ilegales en nuestro suelo y en nuestras aguas territoriales, incluyendo las Senkaku, recurriremos a medidas enérgicas e incluso utilizaremos las fuerzas de autodefensa si fuere necesario", declaró.
No obstante, Noda había matizado sus declaraciones afirmando que ante todo había que dar prioridad a "los esfuerzos diplomáticos" para evitar llegar a tales extremos.
El jefe del gabinete del Primer Ministro y portavoz del Gobierno, Osamu Fujimura, también clarificó las declaraciones de Noda, diciendo que sólo respondía a una cuestión hipotética como la de un ataque militar chino.
"Se refería a una posibilidad teórica" y su declaración "no debe ser considerada como dirigida contra China, tal como lo han dicho los medios", había afirmado Fujimura.
La tensión entre China y Japón aumentaron en julio después de dos incursiones de barcos chinos en las aguas en torno a las islas. Japón había protestado y convocado al embajador chino.
En enero pasado, cuatro japoneses, entre los cuales dirigentes políticos, fueron a las islas, lo que provocó una protesta de Pekín. A fines de dicho mes, China insistió contra el proyecto de Japón de dar nombre a islotes habitados en las inmediaciones del archipiélago en litigio.
El incidente más grave se produjo en septiembre de 2010 con el arresto del capitán de un pesquero chino acusado de haber embestido un navío de los guardacostas japoneses en torno a dichos islotes.
China tomó entonces medidas de represalia obligando a Japón a liberar al capitán chino.