EMOLTV

Culto religioso mexicano impide la entrada a profesores, destruye escuelas y prohíbe ver TV

La comunidad "Nuevo Jerusalén", establecida en Michoacán, vive detrás de un recinto amurallado. Autoridades no descartan realizar operativos policiales contra el grupo.

22 de Agosto de 2012 | 21:31 | AP
imagen

Las mujeres de todas las edades que integran la secta deben usar obligatoriamente un pañuelo sobre la cabeza.

AP
CIUDAD DE MÉXICO.- Los adherentes a una secta cristiana establecida en el estado de Michoacán, al oeste de México, mantenían este miércoles bloqueos para impedir la entrada de profesores estatales a su comunidad, en el marco de una de las más intensas confrontaciones entre grupos religiosos y el Estado desde 1929.

Oficiales locales afirmaron que no se descarta lanzar operaciones policiales a gran escala con el fin de lograr que los niños que residen en la comunidad reciban educación formal.

"Pienso que el próximo paso es ir allá e imponer la ley", señaló Efraín Barrera, portavoz municipal de Turicato, localidad donde se encuentra el complejo amurallado dentro del cual vivien alrededor de 5.000 integrantes de la secta.

El grupo, denominado "Nueva Jerusalén", existe desde hace unos 40 años y se guía por lineamientos bíblicos definidos por sus dirigentes.

Entre sus normas se cuentan la prohibición de ver televisión o escuchar radio y el rechazo de la música y las vestimentas modernas, además de no permitir la educación de los niños en escuelas estatales.

Bajo la ley mexicana, la educación primaria es obligatoria. El martes, la Comisión de Derechos Humanos de ese país y la Iglesia Católica insistieron en que impedir el derecho a la educación infringe los derechos infantiles.

También pidieron al Gobierno que desarticule el bloqueo establecido por la comunidad.

"Es sorprendente que ellos busquen imponer creencias, no una religión, a niños que están en su etapa formativa negándoles el acceso al derecho que todo pequeño tiene a asistir a clases en recintos educacionales provistos por el Estado", enfatizó la Conferencia Episcopal mexicana en un comunicado.

"Las autoridades locales deben intervenir y resolver el conflicto, que podría escalar", advirtió el organismo católico.

Murallas al estilo medieval

"Nueva Jerusalén" fue fundada en 1973 por Nabor Cárdenas, "Papá Nabor", un sacerdote católico disidente que se oponía a las reformas que abandonaron la misa realizada en latín y otras modernizaciones adoptadas luego del Concilio Vaticano II.

Cárdenas, quien falleció en febrero de 2008, dijo haber recibido inspiración de la Virgen María a través de mensajes transmitidos por una anciana analfabeta.

"Papá Nabor" era asistido por Agapito Gómez, a quien se le atribuía la capacidad de canalizar voces del mundo espiritual y hacer predicciones. Con su ayuda ordenó la construcción de la sede de la secta, rodeada de muros y torres al estilo medieval y dotada con varios templos.

Según los miembros de la agrupación, el complejo amurallado será lo único que se mantendrá en pie sobre la Tierra en el momento del Apocalipsis. Éste, de acuerdo a sus creencias, ocurrirá próximamente y se manifestará con catastróficas erupciones volcánicas.

El grupo exige el derecho de disponer de sus propios profesores, desarrollar un currículum especial e imponer que las niñas lleven pañuelos en la cabeza cuando asistan a clases.

Sus dirigentes argumentan que el sistema escolar tradicional introduce "malos hábitos" en la comunidad.

Las mujeres adultas también deben vestir mantos y pañuelos que cubran sus cabellos, de acuerdo a las reglas de la comunidad.

Miembros de la secta atacaron en julio tres locales escolares y quemaron el mobiliario con gasolina. El lunes pasado, en el comienzo del año escolar en México (tras las vacaciones del verano boreal), grupos de partidarios de esa comunidad protagonizaron pugilatos con residentes de Turicato que intentaban llevar a sus hijos a escuelas improvisadas tras la destrucción de las originales.

El conflicto es el más complejo de este tipo registrado en México desde la Guerra Cristera, desencadenada en 1926 y 1929 y protagonizada por milicias armadas que resistían la aplicación de normas destinadas a restringir la autonomía de la Iglesia Católica. El conflicto dejó alrededor de 250 mil muertos.