CHARLOTTE.- Los demócratas inician este martes su convención nacional con la primera dama Michelle Obama como la oradora estelar, antecedida por el emergente líder latino Julián Castro, quienes defenderán la labor de Barack Obama, que enfrentará al republicano Mitt Romney en noviembre.
A tan solo 63 días para que los estadounidenses decidan quién será el inquilino de la Casa Blanca en los próximos cuatro años, la primera dama mostrará el lado menos político de su marido, quien espera que los votantes indecisos le den una segunda oportunidad.
La presentación de la primera dama, de 48 años, en el podio del Time Warner Arena de Charlotte, Carolina del Norte (sureste) está previsto para las 22:30 hora local (23:30 horas en Chile).
Michelle Obama, abogada egresada de las prestigiosas universidades de Princeton y Harvard, llega a esta tribuna con la seguridad de que conecta con el público gracias a su carisma, que le ha valido uno de los índices más altos de popularidad de una primera dama (65 a 70%), 20 puntos más que su marido.
La señora Obama buscará conquistar a los 6.000 delegados demócratas que han llegado a Charlotte para investir oficialmente al Presidente el jueves como el candidato del partido a la reelección.
La semana pasada, Ann Romney, dueña de casa y esposa desde hace 43 años de Romney, conmovió a los republicanos en un discurso donde dio una imagen más humana de su marido, pero Michelle Obama no necesita presentar a su esposo a los demócratas.
Por lo tanto, se espera que la primera dama intente convencer de cuánto ha luchado su esposo por recuperar la economía, insistir en el logro de la histórica reforma del sistema de salud y llegar al corazón de los decepcionados con aquel mensaje de cambio de 2008, que obnubiló al país.
"Michelle puede recordarle a la gente que él a hecho lo mejor en un momento difícil, que su principal preocupación es el pueblo estadounidense", explicó Georgia Kernell, experta política de la Universidad Northwestern.
Kernell recordó que la primera dama "también tiene una historia personal magnífica que contar" a la militancia.
Antes de la aparición de la señora Obama, se espera la presentación del alcalde de San Antonio (Texas) Julian Castro, de 37 años, encargado del discurso principal de la convención, considerado por los expertos una oportunidad que se otorga solo a estrellas políticas en ascenso, tal como ocurrió en 2004 con el entonces desconocido congresista Barack Obama.
La carrera para ganar la presidencia sigue siendo bastante reñida, con Obama superando a Romney por apenas un punto, 47% contra 46%, un empate técnico, según un sondeo de la firma encuestadora Gallup divulgado el lunes.
La encuestadora concluyó que la Convención Nacional Republicana realizada la semana pasada en Tampa (Florida, sureste) no otorgó a Romney el impulso que tradicionalmente dan esos eventos. Ahora se espera ver cómo Obama aprovechará su momento el jueves, cuando sea su turno de aceptar la candidatura en una fanfarria que será transmitida a todo el país por los canales de señal abierta.
Entre el electorado hispano, considerado clave para ganar la presidencial, Romney sí tuvo una leve mejoría de percepción tras la convención, gracias a su promesa de crear más empleos, pero aunque "alcanzó el 30% de confianza" de estos votantes, Obama lo sigue superando por el doble: más de 60%.