El XVIII Congreso del PCCh se lleva a cabo en medio de varias denuncias de corrupción entre dirigentes de la colectividad.
EFEBEIJING.- El Presidente de China, Hu Jintao, subrayó este jueves la necesidad urgente de que el gobernante Partido Comunista de China (PCCh) luche contra la corrupción en sus filas y advirtió de que si fracasa en ello "podría causar la caída del Estado".
Hu hizo la dura afirmación en su último discurso de importancia como Presidente, durante la inauguración del XVIII Congreso de la colectividad gobernante. La crucial cita se realiza en un entorno político enrarecido por varios casos de máximos líderes sorprendidos en actos de corrupción.
En el plano económico, Hu afirmó ante los más de 2.200 delegados reunidos en el Congreso que el desarrollo se debe hacer "más equilibrado, coordinado y sostenible".
Al mismo tiempo, prometió a los habitantes de ese país una duplicación de sus ingresos para el año 2020, y aseguró que el rendimiento económico de toda China también se duplicará para esa fecha.
Según las previsiones de la cúpula gobernante, la crisis económica mundial causará que el crecimiento de China se reduzca en el tercer trimestre de este año a 7,4%, tras dos décadas con un promedio de 10%.
A raíz de esto, China debe acelerar el cambio hacia un nuevo modelo de crecimiento, que se base menos en las exportaciones e inversiones. A cambio se deberá estimular la demanda interna, dijo.
Cambio generacional
En el congreso, los delegados darán inicio a un cambio generacional en la dirigencia china. El sucesor de Hu, de 69 años, será el actual vicepresidente Xi Jinping, que tiene diez años menos.
Según el hasta ahora Presidente, China alcanzó "nuevos éxitos históricos" durante su década como líder del partido, pero tuvo "oportunidades sin precedentes para el desarrollo y (enfrentó) riesgos y desafíos desconocidos en el pasado".
"Debemos apuntar más alto y trabajar más duro y continuar buscando el desarrollo de un modo científico, promover la armonía social y mejorar la vida de las personas", añadió.
Los preparativos del segundo cambio de poder pacífico en la historia de China fueron salpicados por grandes escándalos de corrupción. Además, entre bambalinas, hubo un fuerte tira y afloje por la nueva composición del liderazgo político del país.
Al final del Congreso, el 14 de noviembre, los delegados decidirán la conformación de un nuevo Comité Central. Un día después, este poderoso organismo integrado por 370 miembros realizará su primera sesión en la que aprobará el nuevo Buró Político y su Comité Permanente.
Cerca de dos tercios de la vieja cúpula partidaria dimitirá, según estiman expertos, para darle lugar a la nueva "quinta generación de líderes" encabezados por Xi Jinping.