WASHINGTON.- Jóvenes indocumentados que se movilizaron para convencer a votantes estadounidenses a votar por Barack Obama, celebraron este jueves la reelección del Mandatario y emplazaron a los republicanos a volver a estudiar una reforma migratoria.
"El resultado de esta elección mostró claramente que la agenda antiinmigrantes es la verdadera perdedora, y eso es muy claro para los republicanos", declaró en teleconferencia de prensa Cristina Jiménez, directora ejecutiva de Unidos Soñamos (United We Dream).
Los "dreamers" son los jóvenes que llegaron ilegalmente a Estados Unidos siendo menores de edad, y que desean proseguir estudios superiores o trabajar pero carecen de papeles.
Más de un millón de esos jóvenes, en su inmensa mayoría de origen hispano, podrían beneficiarse de una orden que Obama anunció en junio pasado, la denominada "acción diferida", para detener la deportación de aquellos que llegaron con menos de 16 años, bajo ciertas condiciones.
Los jóvenes indocumentados llamaron a puertas en estados decisivos como Nevada, Florida o Colorado para motivar a los votantes y para instarlos además a elegir a Obama.
"La acción diferida realmente cambió las reglas del juego", aseguró en la teleconferencia Daniel Rodríguez, uno de esos jóvenes, de 26 años, estudiante de Derecho en Arizona.
Los sondeos indican que la decisión de Obama fue recibida de forma entusiasta por los hispanos, que votaron en un 71% por su candidatura, frente al 27% que optaron por Mitt Romney.
United We Dream celebrará un congreso con indocumentados y militantes que espera atraer a 600 personas en Kansas, cuyo secretario de Estado, Kris Kobach, fue el autor de la polémica ley SB 1070 del estado de Arizona para perseguir la inmigración ilegal.