SYDNEY.- Nueva Zelandia señaló hoy que no firmará la segunda fase del Protocolo de Kioto, el mismo día en que el Gobierno australiano anunció su adhesión al nuevo acuerdo que deberá fijar la reducción de gases hasta el 2020.
El ministro neozelandés de Cambio Climático, Tim Groser, explicó que no tiene sentido extender un protocolo sancionado por una parte mínima de los principales emisores de gases y que aplicará su propio programa de reducción de CO2, informó la emisora "Radio New Zealand".
Groser, quien negó que su país abandone el Protocolo, dio dos razones para no rubricar la segunda fase del acuerdo, que sustituirá a la primera fase de Kioto que expira en diciembre.
"Primero, porque creo que es el interés de Nueva Zelanda y, segundo, porque es una cuestión de principio. Si Kioto cubre el 18 por ciento (de las emisiones), quiere decir que el 85 por ciento de las emisiones están fuera (del protocolo)", señaló el ministro.
"No puede haber una persona seria en este país que piense que puede lidiar con el cambio climático sin hacer frente al 85 por ciento de las emisiones. El futuro está en el acuerdo común", espetó.
Nueva Zelandia se une así a otras grandes economías (y emisores de gases) como Estados Unidos, Japón, India, China y Rusia, que nunca han respaldado o han anunciado que no se adherirán a una segunda fase del Protocolo de Kioto.
La oposición neozelandesa, los laboristas y el Partido Verde, han calificado la decisión de "vergüenza" y han criticado a Groser por decir que apoya el Protocolo de Kioto, al tiempo que afirma que no firmará el segundo periodo de compromiso.
Anteriormente, el ministro australiano de Cambio Climático, Greg Combet, manifestó que su país sí rubricará el segundo periodo de Kioto, que también cuenta con el respaldo de los países de la Unión Europea.
El próximo diciembre, la Convención internacional sobre el cambio climático se reunirá en Doha (Catar) para renovar los compromisos del Protocolo de Kyoto, que expira el 31 de diciembre, mientras elabora un nuevo tratado para la reducción de emisiones que deberá estar listo en 2015 y entrar en vigor en 2020.
En el Protocolo de Kioto, la Unión Europea y otros 37 países industrializados, con la ausencia de Estados Unidos, se comprometieron a reducir entre 2008 y 2012 sus emisiones de CO2 en una media del 5% por ciento con respecto a los niveles de 1990.