TEL AVIV.- Al menos 20 personas resultaron heridas, tres de ellas de gravedad, al explotar una bomba en un autobús en el centro de Tel Aviv, Israel.
El atentado, que aun no ha sido reivindicado, ocurrió en la céntrica calle Shaul ha-Melech, aunque la policía rechazó la hipótesis de un atentado suicida.
Numerosas ambulancias llegaron inmediatamente a la zona por la explosión, que según los funcionarios policiales, fue provocada por un "ataque terrorista".
De inmediato no hubo una reacción de Hamas. Pero una radio vinculada al grupo islámico dijo desde Gaza que "si de verdad se trata de un operativo de nuestra resistencia, los felicitamos".
La policía de Tel Aviv registraba la zona donde se produjo el ataque, mientras un helicóptero sobrevolaba la zona.
Según los primeros reportes, una bomba se hallaba escondida en una bolsa en el autobús. Otras fuentes dijeron que tal vez el atacante lanzó el explosivo desde fuera cuando se abrió la puerta para permitir el descenso de pasajeros. Se sospecha que el autor del ataque se encontraría cerca del lugar.
En el interior del vehículo no hay cadáveres, reportó la televisión privada Canal 10.
El atentado se produjo en plano centro de Tel Aviv, a pocos pasos de los Tribunales y del Asia House, un edificio de oficinas.
La policía alejaba a los numerosos curiosos que se agolparon alrededor del vehículo por temor a nuevos ataques.
El parabrisas del autobús de la línea 67 quedó totalmente roto. Un portavoz de la Cruz Roja local (Maghen), Davod Adom, señaló que ocho personas recibieron curaciones en el mismo lugar del atentado y luego trasladadas a un centro médico cercano.