El atentado destruyó varias edificaciones situadas cerca del sitio de la detonación.
ReutersISLAMABAD.- Un atentado explosivo contra una procesión religiosa ocurrido en Pakistán dejó una veintena de muertos, según los primeros informes de las autoridades.
El ataque se produjo la noche del miércoles en Rawalpindi, una de las ciudades más importantes del país, sede de cruciales centros industriales y del cuartel general del Ejército paquistaní.
El autor de la acción fue un terrorista suicida que detonó los explosivos que portaba al paso de una procesión de musulmanes chiíes.
Al menos 23 personas fallecieron debido a la detonación, informó este jueves un funcionario de los servicios de rescate.
El rescatista, Deeba Shahnaz, indicó que el ataque dejó unos 62 lesionados.
El hecho es uno de los atentados terroristas más graves ocurridos en Pakistán. A principios de esta semana, dos personas fallecieron tras la explosión de una bomba colocada frente a una mezquita chiíta en Karachi.
El atentado ocurrió poco antes del inicio en la capital, Islamabad, de una reunión del grupo Developing-8 (D8), formado por países en desarrollo, la mayor parte asiáticos y africanos con población predominantemente musulmana.
Talibanes se atribuyen atentados
Los talibanes paquistaníes reivindicaron este jueves la serie de atentados ocurridos en Pakistán, en particular el que se registró en Rawalpindi.
"Reivindicamos la responsabilidad" de todos los ataques, declaró Ehsanullah Ehsan, portavoz del Tehreek-e-Taliban Pakistan (Movimiento de los Talibanes del Pakistán, o TTP).