BARCELONA.- El jefe del gobierno de Cataluña, Artur Mas, quiere un Ejecutivo de coalición con los independentistas de ERC para dirigir a la región del noreste de España frente a la crisis económica.
Lo que conviene a Cataluña es "un gobierno de coalición con ERC", la segunda fuerza parlamentaria, manifestó la autoridad en su primera rueda de prensa en el Palacio de Gobierno, en Barcelona.
En esos comicios al Parlamento regional catalán, en los que Mas buscaba un aval a su plan independentista, venció su partido, CiU, pero perdió 12 escaños frente a los que tenía y se quedó muy lejos de la mayoría absoluta. Ahora necesita apoyos para gobernar en los próximos cuatro años.
La opción preferida son los independentistas de ERC, con los que ya ha iniciado conversaciones, pero éstos han expresado un rechazo inicial a entrar en un gobierno de coalición. Comparten con Mas presupuestos independentistas, pero son muy críticos con los recortes que el líder de CiU aplicó en la legislatura anterior.
"Cataluña necesita un gobierno fuerte, estable y serio", manifestó. "La fórmula ideal sería un gobierno de coalición. En Holanda se ha hecho así. Coalición entre la primera y segunda fuerzas políticas. En Alemania también hubo una experiencia similar", argumentó.
Si la coalición finalmente no es posible, dijo, "se tendrá que trabajar con una fórmula de máxima estabilidad". El líder de CiU pretende también hablar con los socialistas (PSC), la tercera fuerza catalana, si bien éstos no comparten ni el objetivo independentista ni las políticas de austeridad.
Mas aseguró que no se arrepiente de haber adelantado en dos años las elecciones catalanas pese a la importante caída en escaños de su partido.
"Estas elecciones convenía hacerlas", dijo, porque ahora "tenemos una fotografía muy precisa" de Cataluña.
Esa imagen tiene para él dos elementos clave. Por un lado, dijo, se ha visto que "un Gobierno que aplica políticas de austeridad puede salir adelante". Y por otro, que hay "una apuesta clara a favor del derecho a decidir, a favor del Estado propio", dijo, en referencia a que 87 de los 135 diputados del nuevo Parlamento catalán están a favor de una consulta de autodeterminación que rechaza frontalmente el gobierno de Rajoy.