Hasta a caballo ingresaron a los locales saqueados los participantes en los desórdenes.
AFPBUENOS AIRES.- El Gobierno argentino dispuso este jueves el envío de 400 gendarmes a la ciudad de Bariloche, sacudida durante la jornada por disturbios y saqueos masivos de locales comerciales.
La solicitud del despliegue especial fue hecha por el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilnek. Un total de 150 policías de la provincia fueron enviados a reforzar el contingente de Bariloche.
"Las fuerzas de seguridad provincial se encuentra claramente superadas por los manifestantes", afirmó el gobernador.
Hasta esta noche se reportó que al menos 20 personas resultaron heridas en los desórdenes.
Choques con la policía
Los incidentes habían comenzado a las 09:30 horas con el desvalijamiento del supermercado Changomás, que pertenece a la cadena Walmart situado en la ruta 40 Norte. Allí, decenas de personas se llevaron gran cantidad de alimentos, electrodomésticos y otros bienes.
La turba también volcó varios automóviles durante los enfrentamientos.
Los participantes en la acción, cerca de un centenar de personas, protagonizaron choques con la policía y luego extendieron los saqueos a otros establecimientos, entre ellos un supermercado de la cadena Todo.
El supermercado Anónima, el de mayor tamaño en la ciudad, fue prácticamente "sitiado" por los saqueadores, mientras era custodidado por alrededor de 20 efectivos policiales.
Hasta esta tarde, los disturbios continuaban en esa localidad famosa por sus atractivos turísticos y que atrae a miles de chilenos en la temporada de vacaciones.
Gobierno sospecha premeditación
La agencia oficial Telam señaló hoy que el alcalde de Bariloche, Omar Goye, había advertido la posibilidad de que se produjeran saqueos. La semana pasada, el edil había pedido a las cadenas de retail que donaran bolsas de alimentos a personas de bajos recursos.
El jefe de Gabinete del gobierno de la Presidenta Cristina Fernández, Juan Manuel Abal Medina, afirmó que los atacantes constituyen "pequeños grupos marginales enormemente violentos" y relacionó los disturbios de hoy con la denuncia del Ejecutivo sobre el supuesto sabotaje de redes eléctricas en la provincia de Neuquén, vecina a Río Negro.
Según el ministro, ambos hechos "hablan de cuestiones muy particulares que no casualmente ocurren en una fecha como hoy", cuando se cumplen 11 años de las jornadas de violenta protesta social, que incluyeron saqueos y que terminaron con la caída del entonces Presidente, Fernando de la Rúa, quien renunció el 20 de diciembre de 2001.