BEIRUT.- La responsable de las operaciones humanitarias de Naciones Unidas, Valerie Amos, advirtió hoy que más de 650.000 personas huyeron de Siria a raíz de la violencia y permanecen refugiadas en países vecinos, en una situación que es "catastrófica y está empeorando".
La funcionaria de ONU sostuvo que el flujo de refugiados provoca además "problemas con la población local" en los países vecinos, en declaraciones realizadas al margen del Foro Económico Mundial de Davos.
Al menos 70 personas murieron en una semana en enfrentamientos entre milicias kurdas y grupos de rebeldes jihadistas en la frontera entre Siria y Turquía, reportaron fuentes locales y de la oposición.
El reporte fue difundido hoy por el diario "Hayat", que informó combates en Ras al Ayn, localidad ubicada en la región este de Hasake, bajo control rebelde.
El gobierno ruso se manifestó hoy dispuesto a organizar en Moscú una cumbre internacional para debatir la situación de los refugiados sirios, propuesta que manifestó el Presidente, Vladimir Putin, en un encuentro con su colega libanés, Michel Suleiman.
El Mandatario aseguró que Moscú está preparada para ayudar a El Líbano en la "solución de los problemas humanitarios" y avanzar en una "ayuda financiera directa cuyo volumen debe ser decidido".
El canciller ruso, Serguéi Lavrov, advirtió hoy que el objetivo de los grupos rebeldes sirios de provocar la salida del poder del presidente, Bashar al-Assad, es el obstáculo principal para el cese de los enfrentamientos.
Si los rebeldes sirios mantienen esa meta "no sucederá nada bueno, los enfrentamientos armados continuarán y la gente seguirá muriendo", manifestó el secretario de Estado.
Lavrov consideró que no se realizó hasta hoy ningún intento serio para convencer a los rebeldes de iniciar un diálogo de paz y sostuvo que para Rusia, un aliado histórico de la familia Assad, la prioridad "no es alcanzar objetivos geopolíticos, sino estabilizar la situación y detener el derramamiento de sangre".
En tanto, unos 20.000 refugiados sirios arribaron a Jordania en las últimas 72 horas, a raíz de los combates en la región de Daraa, que provocó un aumento de las personas que huyen del país.
Fuentes del ejército de Amman reportadas por la agencia Petra dijeron que entre los refugiados se registraron numerosos civiles heridos y en las últimas horas cruzaron la frontera 12.000 personas en dirección a Ramtha.
Un grupo de izquierda realizó hoy una nueva protesta en Turquía contra el despliegue de misiles Patriot en la frontera con Siria, pedido por Ankara a la OTAN, y agredió a soldados alemanes enviados para poner en operaciones el sistema de defensa.
La protesta de la Unión de los Jóvenes Progresistas (Tgb) se produjo en el puerto de Iskenderun, cuando se desplazaban en el centro de la ciudad seis soldados alemanes, entre ellos una mujer.
La policía local intervino y los militares se refugiaron en un comercio, del que salieron bajo protección de la fuerza de seguridad.