MALAI.- Cientos de ex combatientes del grupo izquierdista Jemeres Rojos participaron en el funeral de Ieng Sary, ex ministro de Relaciones Exteriores del régimen establecido por esa agrupación y que fue responsable de millones de muertes en Camboya durante la década de 1970.
Sary falleció el jueves de la semana pasada en su celda en la capital, Phnom Penh, a los 87 años de edad.
El ex canciller del régimen comunista establecido por los Jemeres Rojos en 1975 se encontraba procesado por genocidio, crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra. En ningún momento dio explicaciones sobre su rol en ese trágico episodio de la historia camboyana.
El genocidio lanzado en ese país cobró la vida de alrededor de dos millones de personas.
Paradójicamente -si se considera la antigua militancia comunista de Sary-, las ceremonias fúnebres del ex jerarca comenzaron al amanecer con plegarias de monjes budistas en Malai, su ciudad natal, situada muy cerca de la frontera tailandesa y antiguo bastión de los Jemeres Rojos.
El régimen marxista establecido por esa agrupación armada se inició en 1975 con la declaración del "Año Cero", a partir del cual sus promotores intentaron hacer desaparecer el mercado, la religión, la influencia extranjera y la familia tradicional.
También estableció la relocalización forzosa de la población urbana en el campo y el exterminio sistemático de quienes eran considerados "burgueses".
El dominio del Jemer Rojo sobre Camboya concluyó con la invasión de Camboya por fuerzas de Vietnam en 1979.
Sary, quien ejerció también como viceprimer ministro, entre otros cargos, había sido arrestado en noviembre de 2007 en la opulenta mansión en la que vivía en la capital camboyana, y fue sometido a juicio junto a su esposa, Ieng Thirith.