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Santiago: Miércoles 04 de diciembre del 2024 | Actualizado 00:35
MIAMI.- Dos paracaidistas islandeses fallecieron en un campamento en Florida, Estados Unidos, debido a que no desplegaron de forma correcta sus equipos, según indicó uno de los propietarios del centro deportivo.
Las víctimas fatales fueron identificadas como el instructor Orvar Arnarson, de 41 años, y el estudiante Andrimar Pordarson, de 25, ambos naturales de Islandia. Los hombres saltaron por separado.
La policía comenzó a buscar los restos del instructor y del estudiante después de que ninguno de los dos regresara con su grupo tras un salto. Esto originó una exhaustiva búsqueda por aire y tierra en los terrenos del centro Zephyrhills, a unos 50 kilómetros al noreste de Tampa.
El hecho de que los occisos no desplegaron sus principales paracaídas lleva a pensar que podrían haber perdido el sentido de altitud y no sabían dónde se encontraban durante la caída, lo cual es inusual, indicó T.K. Hayes, copropietario de Skydive City.
Ambos hombres llevaban dispositivos de activación automática, que se despliegan si el principal paracaídas no se abre a tiempo.
"Esos dispositivos se activaron en ambos... pero los paracaídas de reserva no contaron con suficiente tiempo para abrirse por completo", destacó Hayes. "Estaban fuera de sus depósitos pero no inflados a tiempo antes del impacto", agregó.
Hayes estuvo en el lugar el sábado con las autoridades, revisando los equipos de ambos hombres a fin de determinar si todas las partes funcionaban correctamente.
"En la mayoría de los accidentes, muchas veces se trata de error humano", dijo. "Francamente dudo que haya habido un problema con el equipo". Pero destacó que las autoridades seguían investigando.
Ambos hombres habían completado otros dos saltos el sábado por la mañana con otras 20 personas. Pero al no regresar del tercer salto se inició su búsqueda.
Los cadáveres de ambos fueron hallados desde el aire la noche del sábado en un área forestal al sur del aeropuerto municipal de Zephyrhills.
Las víctimas integraban un grupo de unos 12 paracaidistas que viajaban todos los años desde Islandia hacia Florida, dijo Hayes.
El año pasado 19 paracaidistas murieron en Estados Unidos de un total de 3,1 millones de saltos.
