ALMATY, Kazajistán.- Las principales potencias aun esperan una respuesta a la propuesta hecha a Irán sobre su programa nuclear, que es objeto de reuniones comenzadas este viernes en Almaty, mientras que Teherán insiste en su derecho al enriquecimiento de uranio.
"No hay aún una respuesta clara y concreta a la propuesta" hecha a Irán por las grandes potencias en su reunión anterior de febrero en Almaty (Kazajistán), declaró un diplomático occidental.
"Nuestras ideas suscitaron comentarios interesados, pero que no fueron totalmente explicados" en el detalle por los negociadores iraníes, agregó el diplomático.
Por su lado, Alí Bagheri, adjunto al principal negociador iraní Said Jalili, indicó que Irán presentó una contraoferta, sin entrar en detalles.
Los representantes de los países del grupo 5+1 (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia y China además de Alemania) y de Irán, están reunidos en un hotel de Almaty para participar de las reuniones previstas hasta el sábado sobre el programa nuclear iraní.
"Insistimos para que se lleve a cabo una segunda sesión plenaria esta tarde, de manera que (los iraníes) puedan responder con los detalles que permitirán hacer progresos", agregó el diplomático occidental.
La representante de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, que encabeza las negociaciones por el grupo 5+1, emitió la esperanza de que Irán dé una "respuesta pensada y equilibrada para poder ponerse de acuerdo sobre la manera de progresar".
En la anterior reunión, los países del grupo 5+1 habían presentado una nueva oferta a Teherán que preveía la "suspensión" en vez del "cese" de las actividades de enriquecimiento de uranio a 20% en Irán.
A cambio proponían atenuar ciertas sanciones sobre el comercio del oro y el sector petroquímico, que ahorcan la economía iraní.
El grupo 5+1 pide también a Irán que cierre su planta de enriquecimiento de Fordo, considerado como el único del país a salvo de un ataque militar, y que envíe sus reservas de uranio enriquecido a 20% al extranjero.