SANTIAGO.- Sábado 19 de marzo de 1994. Aterriza en el aeropuerto Arturo Merino Benítez el avión de la ex primera ministra de Gran Bretaña, Margaret Thatcher, atendiendo a una invitación privada que le formuló la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) y el Centro de Estudios Públicos (CEP).
En nuestro país permaneció cinco días, participó en varias conferencias y actividades, que incluyeron encuentros con el Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle y el fallecido ex general Augusto Pinochet.
Pero fue un desvanecimiento frente al empresariado nacional el que marcó su estadía en Chile, pese a que sus cercanos aseguraron que se trató de una infección intestinal. De inmediato, surgió una serie de especulaciones en Gran Bretaña que hablaban de una fatiga de la ex premier.
"El drama del colapso de Thatcher" o "¿está finalmente afectada por la fatiga del metal?", titulaban algunos medios británicos sobre su estado de salud.
Juan Pablo Illanes, ex director del diario "El Mercurio", fue uno de lso que estuvo presente ese día. "De repente oigo que su voz se empieza a quedar pegada, se le enreda la lengua y segundos después se produce un silencio de esos aterradores", recordó en "La Segunda".
"Me doy vuelta y la veo que está como cayéndose hacia el micrófono, pero con mucha fuerza de voluntad trató de seguir hablando y se aferraba con toda su fuerza al podio, hasta que simplemente se empezó a desmoronar", contó.
Y agregó: "Yo pensé que le estaba dando un infarto cerebral. Estábamos todos acontecidos al ver un drama de proyección mundial: ¡que se fuera a morir Margaret Thatcher en un almuerzo en Santiago!", señala.
Temor por Argentina
Otro de los focos de tensión en torno a su visita radicaba en la inquietud que generaba la posibilidad de que Thatcher se refiriera negativamente hacia Argentina y recordara la "Guerra de las Malvinas".
Esto, luego de que en su paso por Brasil, previo a venir a Chile, la denominada "Dama de hierro" dijera que el país vecino le debía mucho de su democracia.
Sin embargo, nada de eso ocurrió. Se presentó ante 450 empresarios, políticos y autoridades; fue declarada visita ilustre de la municipalidad de Santiago; y asistió a la Feria Internacional del Aire y del Espacio (FIDAE).
Finalmente, la ex "Dama de Hierro" -que en dicha época promocionaba su libro "Las Memorias de la Calle Downing"- abandonó Chile rumbo a México la noche del 23 de marzo.