WASHINGTON.- Un día después de las explosiones que afectaron a la maratón de Boston y que dejaron tres muertos y más de un centenar de heridos, el Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reconoció que el hecho fue un "acto terrorista".
"Si se usa una bomba dirigida contra civiles, es un acto terrorista", afirmó el Mandatario, en una conferencia desde la Casa Blanca.
Tras la tragedia, Obama evitó calificar de terrorismo los hechos que ocurrieron durante la cita deportiva, una de las cuatro más importantes del mundo en esa especialidad.
"La Oficina Federal de Investigaciones investiga esto como un acto de terror. Lo que no sabemos es quién lo llevó a cabo, no sabemos si fue un grupo extranjero o interior, o si fue la acción de un individuo", añadió.
"No tenemos aún una idea del móvil" de este atentado, insistió el el jefe de Estado, tras haber sido informado de los últimas novedades de la investigación. "En el momento actual todo lo demás no deja de ser una especulación", aclaró.
El jefe de Estado norteamericano también le aseguró a los estadounidenses que "tendrán respuesta" de lo sucedido.