SAVAR.- Miles de trabajadores marcharon el miércoles por el centro de Dacca en una conmemoración del Primero de Mayo marcada por la terrible tragedia ocurrida en ese país cuando un edificio se desplomó y mató al menos a 386 personas, según los últimos reportes de los rescatistas.
Los manifestantes exigieron mejores condiciones de seguridad en el trabajo y pidieron la pena de muerte para el propietario de la edificación, quien fue detenido por la policía.
Durante la marcha, gran cantidad de trabajadores a pie, en camionetas y motocicletas se abrieron paso por el centro de la capital. Los participantes ondeaban banderas nacionales, tocaban tambores y coreaban la frase "¡Acción directa! ¡Pena de muerte!"
A través de altavoz instalado en la parte trasera de un camión, un familiar de dos de las víctimas expresó el dolor de quienes perdieron seres queridos en la tragedia, que ahondó las críticas contra las condiciones de trabajo que viven muchos bengalíes que laboran en el sector textil orientado a la exportación, principalmente a países occidentales.
"Mi hermano ha muerto. Mi hermana ha muerto. Su sangre no será en vano", advirtió.