MADRID.- Madrid albergará en junio el V Congreso Mundial contra la pena de muerte, que buscar entablar un diálogo en favor del abolicionismo con el mundo árabe y africano, la segunda región que más ejecuta después de Asia.
Durante 2012 fueron ejecutadas al menos 682 personas en veintiún países y otras 1.722 fueron condenadas a muerte.
Organizado por la asociación francesa Juntos contra la pena de muerte (ECPM, siglas en francés), el congreso tendrá lugar entre el 12 y el 15 de junio y participarán unas 1.500 personas -expertos políticos, miembros de la sociedad civil y representantes gubernamentales y de organizaciones internacionales- procedentes de casi un centenar de países.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, la alta representante de la política exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, y los ministros de Exteriores de España, Francia, Suiza, Noruega y Austria participarán en este encuentro, cuyo objetivo es intentar revitalizar el movimiento abolicionista.
Para la organización del Congreso, la abolición universal de la pena de muerte está en marcha ya que en los últimos cuarenta años el mundo ha vivido "un cambio abolicionista" y ha pasado del veinte por ciento a más del 70 por ciento el número de Estados que han renunciado a aplicar la pena capital.
El año pasado la gran mayoría de las ejecuciones se produjeron en Arabia Saudí, China, Corea del Norte, Estados Unidos, Irak, Irán, Sudan y Yemen.
Entre los Estados que aún mantienen la pena de muerte en su legislación, a excepción de algunas democracias como Estados Unidos, Japón, India y Taiwán, las condenas a muerte se dictaron principalmente en países gobernados por regímenes autoritarios.
Con un solo Estado abolicionista (Yibuti), la región de Medio-Oriente-África del Norte es la segunda que más ejecuta después de Asia.
Por ello uno de los objetivos principales del Congreso será centrarse en esa región, así como promover la implicación de las organizaciones intergubernamentales y la sociedad civil y educar y sensibilizar sobre la pena de muerte.
Mientras que las ejecuciones se repiten continuamente en Irán e Irak, se observa una tendencia a disminuir su número y a adoptar reformas penales favorables al movimiento abolicionista en otros países, como Marruecos, Líbano, Túnez o Argelia, según la organización francesa ECPM.
Las ejecuciones cayeron notablemente en los últimos años en EE.UU. y en 2012 fueron aplicadas en 43 casos en todo el país, especialmente en los estados sureños, con Texas a la cabeza, según las estadísticas del Death Penalty Information Center.
Amnistía Internacional detectó -en su último informe anual sobre la pena capital presentado en abril- algunas "señales positivas" durante 2012 en el camino hacia la abolición de la pena de muerte.
Esta organización consideró que prosigue la tendencia global hacia el final de esa práctica, después de que el año pasado se sumase Letonia, el nonagésimo séptimo país abolicionista, y se registrase un descenso de las condenas a muerte en un mayor número de Estados.
No obstante, AI también encontró retrocesos en 2012, como que varios países retomaron ese castigo después de un tiempo sin aplicarlo, caso de Gambia, la India, Japón y Pakistán, o el alarmante aumento en las ejecuciones en Irak.
Tomarán parte en el Congreso algunos ex condenados a muerte, como el español Joaquín Martínez o la iraní Marina Nemat, así como el ex director del corredor de la muerte del Estado de Virginia Jerry Givens.