El ex mandatario está apelando a razones humanitarias para lograr su libertad.
ReutersLIMA.- El ex presidente peruano Alberto Fujimori regresó hoy al cuartel de la Policía en Lima, donde cumple condena por delitos de lesa humanidad, tras permanecer hospitalizado durante un día y medio a causa de una gastritis aguda.
Fujimori, de 74 años, fue trasladado en una ambulancia rodeada de vehículos de seguridad, lo que permite inferir que la gastritis que lo afectó ya está bajo control.
El ex mandatario fue internado la noche del viernes en una clínica privada peruano-japonesa tras padecer dolores estomacales y, según sus allegados, lucía demacrado.
La hija del ex mandatario hoy detenido, la ex candidata presidencial Keiko Fujimori, y el médico de cabecera, el parlamentario Alejandro Aguinaga, dijeron que las pruebas apuntarían entre otras cosas a descartar un cáncer estomacal, pero lo que se halló fue "gastroduodenitis erosiva y lesiones agudas de la mucosa gástrica con puntos sangrantes".
La hospitalización se produjo en momentos en que la familia y los seguidores de Fujimori aumentan presiones para que el presidente Ollanta Humala le dé un indulto por "razones humanitarias". Para Keiko Fujimori, la indefinición sobre el tema contribuye al deterioro de la salud de su padre.
Fujimori, que gobernó de 1990 a 2000, paga desde 2007 una condena de 25 años como autor mediato de 25 asesinatos y dos secuestros. El ex mandatario sufre de lesiones recurrentes en la boca que pueden degenerar en cáncer, además de depresión aguda y de hipertensión arterial.
El pedido de indulto es revisado por la Comisión de Gracias Presidenciales, dependiente del Ministerio de Justicia, que le dará a Humala una opinión no vinculante. El jefe de Estado ha dicho que el otorgamiento del beneficio dependerá de las condiciones de salud.