Presidente colombiano niega plan para desestabilizar a Nicolás Maduro

BOGOTÁ.- El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, negó estar involucrado en un complot para desestabilizar al Gobierno de Venezuela, calificando como "descabellada" la denuncia hecha por su homólogo del vecino país luego de fustigarlo por haberse reunido con el líder de la oposición venezolana.

El mandatario de la derecha moderada anunció que acudirá a los canales diplomáticos para solucionar lo que calificó como un "malentendido" por parte del Gobierno del izquierdista Nicolás Maduro, quien puso en revisión las relaciones políticas y comerciales entre ambas naciones.

En su primera declaración sobre el tema, Santos afirmó que mantendrá el espíritu del acuerdo del 2010 que logró con el fallecido Hugo Chávez y que permitió restablecer las suspendidas relaciones después de altibajos durante el mandato de su predecesor Alvaro Uribe. En el estreno de su Gobierno, Santos también tuvo que desactivar una crisis diplomática con Venezuela.

"Es descabellado pensar que el Gobierno colombiano esté enterado o, peor aún, que esté apoyando algún tipo de acción para desestabilizar el Gobierno de Venezuela", dijo Santos en un acto en el departamento del Valle, en el suroccidente del país.
 
"Creemos que para el bien de Venezuela y para el bien de Colombia, cualquier malentendido lo podemos resolver civilizadamente, con prudencia, por las vías diplomáticas", agregó al advertir que las disputas con su vecino impactan directamente a su país.

Las relaciones entraron en crisis por cuestionamientos hechos por el Gobierno venezolano a una reunión que Santos sostuvo esta semana con el líder opositor Henrique Capriles y que fue considerada por Maduro como "una puñalada".

Además, el heredero político de Chávez vinculó el encuentro a un plan para fraguar un complot político y económico para derrocarlo y reaccionó anunciando una revisión de la participación de Venezuela en el proceso de paz del Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC.

Las relaciones de Colombia y Venezuela han sufrido varios altibajos en la última década, principalmente durante los gobiernos de Uribe y de Chávez, pero es la primera crisis que se registra desde que Santos asumió el poder en agosto del 2010.

En Venezuela, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, reiteró que Santos le puso una bomba a las relaciones bilaterales al recibir al líder de una derecha que calificó de "criminal, asesina y fascista".

"El Gobierno venezolano y el pueblo de Venezuela rechazan esas atenciones a golpistas, asesinos, fascistas, allá en la hermana Colombia y rechaza esas atenciones porque nosotros hemos sido leales con el pueblo de Colombia", dijo Cabello en un acto en el estado Zulia.