WASHINGTON.- Las autoridades de Colorado siguen combatiendo un enorme incendio que ya dura cuatro días, que ha provocado la muerte a dos personas y que hoy fue declarado oficialmente el peor de la historia de ese estado de EE.UU.
"Es como si hubiera estallado una bomba nuclear", dijo hoy a periodistas el alguacil del condado de El Paso, Terry Maketa, tras examinar el área devastada por el incendio.
Con 473 casas destruidas y 17 dañadas, las autoridades consideran ya el incendio el más destructivo de la historia del estado, sólo por encima del que hace un año acabó con 346 viviendas en la zona del Cañón Waldo.
Los bomberos y equipos de emergencia han logrado extinguir el 45% del incendio, que sigue ardiendo en un área de unos 65 kilómetros cuadrados, explicó Maketa.
Aún se desconoce qué provocó el incendio, pero los investigadores creen que fue causado por humanos, según el alguacil.
Las autoridades han levantado ya la mayoría de las órdenes de evacuación obligatorias, que afectaron en los últimos días a unos 38.000 residentes.
El gobernador de Colorado, John Hickenlooper, firmó el jueves una orden para declarar el estado de emergencia por desastre en tres zonas afectadas, con un desembolso de urgencia de 10 millones de dólares para dotar de recursos a los servicios de protección civil.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, llamó el viernes a Hickenlooper para expresar sus condolencias por los dos fallecidos y comprometerse a seguir proporcionando "el apoyo necesario a los esfuerzos estatales y locales", según informó hoy la Casa Blanca en un comunicado.
Más de 1.000 personas están respondiendo al incendio en Colorado, con la ayuda de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (Fema) y el Departamento de Defensa, señaló la Casa Blanca.