CIUDAD DE MÉXICO.- Al menos 11 osos negros ingresaron durante junio a zonas urbanas de Nuevo León, en México, en búsqueda de alimento y agua, los cuales escasean en su hábitat natural. Así lo informó el gobierno en un comunicado difundido este domingo.
"La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) registró 11 avistamientos de osos negros en diversos municipios de Nuevo León en el mes de junio, de los cuales nueve han sido rescatados y regresados a su hábitat, y dos murieron al ser atropellados por automovilistas", dice la institución en su parte.
El oso negro, una especie catalogada en peligro de extinción, enfrenta una escasez de agua y alimento en su hábitat natural debido a las altas temperaturas, "situación que los obliga a acercarse a la mancha urbana", opinan los expertos de PROFEPA.
El último avistamiento de un oso negro ocurrió el 27 de junio.
La PROFEPA recomendó cubrir recipientes que contengan basura y agua, ya que los osos tienen un olfato muy sensible y pueden rastrear lo que buscan desde lejanas distancias.
El Oso Negro (Ursus americanus) puede medir hasta dos metros y es originario de América del Norte. Actualmente existen ejemplares desde Canadá hasta el centro de México, especialmente en zonas boscosas.