Condenan por corrupción a pena de muerte aplazada a ex ministro chino

BEIJING.- Un ex ministro chino que estuvo a cargo de la hoy disuelta cartera de Ferrocarriles, en su día la sección más poderosa del Gobierno comunista después de la de Defensa, fue sentenciado a la pena de muerte "aplazada", que en la jerga judicial del país equivale a cadena perpetua.

Liu Zhijun fue declarado culpable de recibir sobornos y de abuso de autoridad en un millonario caso de corrupción analizado por el Tribunal Intermedio Número 2 de la capital, informaron hoy los medios oficiales.

La condena es la más importante desde que las nuevas autoridades chinas lanzaron una campaña contra las irregularidades a finales del año pasado.

Al mismo tiempo, el juzgado dispuso la confiscación de todos los bienes personales del sentenciado, quien fue privado de sus derechos políticos de por vida.

El ex ministro, hoy de 60 años de edad, gestionó la gigantesca red de los ferrocarriles chinos entre 2003 y 2011, hasta que la Comisión Disciplinaria del Partido Comunista de China (PCCh) abrió una investigación contra él por violaciones de la disciplina.

Aparentemente como resultado de esa investigación, el nuevo Gobierno comunista decidió desmantelar el ministerio del ramo en marzo de este año y repartir sus competencias en otros organismos.

Dinero empresarial

El Tribunal Intermedio de Beijing había comenzado la vista el 9 de junio pasado. El ex directivo fue acusado de aprovecharse de su posición para ayudar a once empresarios a ganar contratos, a cambio de 64.600 millones de yuanes (10.530 millones de dólares) en sobornos entre 1986 y 2011.

Entre los favorecidos figuraban el magnate de los negocios Ding Yuxin y varios de sus parientes, a quienes el entonces ministro ayudó a obtener contratos de construcción de ferrocarriles "saltándose las normas y jugando al favoritismo", según el acta judicial.

Según el documento, citado por la agencia oficial Xinhua, "la mala praxis de Liu ha supuesto enormes pérdidas públicas en detrimento de los intereses de la gente, por lo que debería ser considerado responsable criminal de corrupción y abuso de poder".

China ha invertido ingentes cantidades en su red de ferrocarriles y en la creación de un sistema de trenes de alta velocidad.

La sentencia contra Liu es la primera impuesta contra un ex ministro tras la llegada al poder del nuevo Gobierno chino encabezado por el Presidente Xi Jinping, que asumió la jefatura de Estado en marzo con el predicamento de luchar contra la galopante corrupción al interior del régimen.