Tropas africanas fueron invitadas de honor en desfile en los Campos Elíseos en Francia

PARÍS- Las tropas africanas y las unidades francesas desplegadas en Malí fueron las invitadas de honor en el tradicional desfile de conmemoración del 14 de julio en la avenida de los Campos Elíseos de París, presidido por el mandatario François Hollande.

A bordo de un vehículo de comando, el presidente pasó revista a las tropas desde el Arco del Triunfo, antes de recorrer la emblemática avenida de los Campos Elíseos, escoltado por jinetes de la Guardia Republicana.

A su paso, se escucharon algunos silbidos y abucheos por parte de militantes contra el matrimonio homosexual.

Como es habitual, antes del desfile militar, la patrulla de Francia sobrevoló el cielo parisino donde proyectó columnas de humo con los colores azul, blanco y rojo de la bandera francesa.

El desfile de las tropas terrestres estuvo encabezado por unos 60 soldados malienses, seguidos por un destacamento de los cascos azules de la MINUSMA (Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en Malí) que tomará el relevo de las tropas francesas en Malí para garantizar la seguridad en ese país en donde Francia tiene desplegados unos 3.200 militares.

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el presidente maliense interino, Dioncounda Traore, y los ministros de Defensa de trece países africanos que participaron en las operaciones en Malí estuvieron entre los invitados de honor en este día de fiesta nacional.

Un destacamento croata, invitado de honor dos semanas después de que ese país ingresara en la Unión Europea, también marchó bajo la mirada del presidente Ivo Josipovic.

Aunque las tropas que desfilaron a pie - 4.823 hombres y mujeres - son igual de numerosas que el año pasado, el número de vehículos (265, es decir un 35% menos que en 2012), de aviones y de helicópteros (un 12% menos) fue ligeramente reducido, según el ministerio de Defensa.

Luego del desfile, el presidente Hollande dará una entrevista por televisión en directo desde el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia, en la que esbozará un balance de los 14 primeros meses de su mandato.

El gobierno francés enfrenta una situación económica y social preocupante con un desempleo en aumento que supera los 3,2 millones de personas y cuya inversión de la curva prometida para fin de año por Hollande deja dubitativos a los expertos.