70 heridos siguen hospitalizados, 22 de los cuales están en unidades de pacientes críticos.
EFESANTIAGO DE COMPOSTELA.- El número de fallecidos por el descarrilamiento del tren en Santiago de Compostela, España, subió este domingo a 79 personas.
Según informaron las autoridades sanitarias, falleció una de las personas que se encontraba herida.
Además, hay 70 pacientes ingresados en los hospitales gallegos, de los que 22 están en unidades de pacientes críticos –20 adultos y dos niños–.
En tanto, el maquinista del convoy, Francisco José Garzón Amo, de 52 años, quien fue dado de alta ayer, debe declarar esta tarde ante el juez, según informó un portavoz del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
Garzón, quien fue acusado por "homicidio por imprudencia", fue detenido formalmente la noche del jueves y este domingo se termina el plazo máximo de 72 horas de detención preventiva antes de pasar a disposición judicial.
Con dos investigaciones abiertas, una judicial y la otra administrativa, las autoridades imputan al maquinista, con una larga experiencia profesional, el no frenar a tiempo en una curva limitada a 80 km/h.
Pero en la pequeña localidad gallega de Monforte de Lemos, donde vive el maquinista, su círculo cercano sale en su defensa. "Es el único accidente que ha tenido, es un excelente profesional", dijo Antonio Rodríguez, responsable de transportes en Galicia del sindicato UGT y amigo del conductor, con el que empezó a trabajar en Renfe en 1982.
Para este lunes está previsto el funeral solemne para las víctimas, el que se realizará en la catedral y al que asistirán el príncipe heredero Felipe, su esposa Letizia y la infanta Elena.
Enfrente del edificio o en la adyacente gran plaza del Obradoiro, flores, velas, pequeñas notas manuscritas o conchas de vieira, símbolo de Santiago Apóstol, fueron depositados por peregrinos de todo el mundo en honor a las víctimas y sus familias.
Desde el sábado, las familias han empezado a recuperar los equipajes de las víctimas de un gimnasio dispuesto para esta labor. En silencio y con el rostro compungido, poco a poco van retirando las maletas de sus allegados heridos o difuntos.
Entre los fallecidos, mayoritariamente españoles, figuran ocho extranjeros, entre ellos una mexicana, una dominicana, una venezolana y un brasileño.