James Comey.
APWASHINGTON.- El senado de Estados Unidos aprobó el lunes la designación de James Comey al frente del FBI, la policía federal, tal como había propuesto el Presidente Barack Obama.
Comey, antiguo integrante de la administración de George W. Bush, ex fiscal y especialista en materia de seguridad nacional durante más de 20 años, obtuvo en el senado 93 votos a favor y uno en contra, el del republicano Rand Paul.
Durante su audiencia en el Senado a comienzos de mes, Comey había afirmado que la simulación de ahogo -técnica de interrogatorio practicada durante la presidencia de Bush- se asimilaba a la "tortura", y había manifestado su oposición a los métodos utilizados por entonces por la CIA.
Comey había amenazado con dimitir en 2004 para obligar a la Casa Blanca a modificar uno de los programas de vigilancia secreta de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés), aunque aprobaba la mayor parte de la política llevada adelante.
Finalmente dejó la administración en 2005 para unirse al gigante de la defensa Lockheed Martin.
El especialista sucede en el cargo a Robert Mueller, quien asumió justo antes de los ataques del 11 de septiembre de 2001. Su mandato estuvo signado por los cuestionamientos a los programas de vigilancia de las comunicaciones de la NSA, revelados por el ex contratista de la agencia Edward Snowden.
En su audiencia en el Senado, Comey se manifestó prudentemente abierto a un debate sobre la transparencia de estos programas, aunque dijo que en general "la extracción de metadatos y el análisis de metadatos es una herramienta importante en la lucha contra el terrorismo".