Obama y Putin podrían reunirse para tratar la crisis en Siria.
NYT
WASHINGTON.- El Presidente estadounidense, Barack Obama, despegó este martes en el Air Force One con rumbo a Estocolmo (Suecia), donde comenzará una gira de tres días que le llevará a reunirse con sus socios del G20 en Rusia, en pleno desarrollo de los planes para llevar a cabo
un ataque en Siria.
Obama partió desde la Base Aérea de Andrews con la compañía de los miembros de su equipo, entre ellos su asesora de Seguridad Nacional, Susan Rice.
El Mandatario y sus asesores analizan durante días las opciones para llevar a cabo una intervención militar contra el régimen sirio, al que acusan de utilizar armas químicas en gran escala contra civiles.
La denuncia ha sido negada hasta ahora por el gobierno de Bashar Al-Assad.
La acción, que la Casa Blanca asegura que será "limitada", marcará la agenda del viaje, que llevará a Obama a coincidir en San Petersburgo con el Presidente ruso, Vladimir Putin, uno de los principales opositores internacionales a la acción militar.
El gobernante estadounidense permanecerá en visita oficial en Suecia el miércoles y jueves, antes de viajar a Rusia para asistir a la cumbre del G20 en San Petersburgo, que se celebrará los días 5 y 6 de este mes.
También celebrará varias reuniones bilaterales con otros líderes durante la reunión internacional, aunque la Casa Blanca no reveló con quiénes. Pese a ello, se da por hecho que las conversaciones serán dominadas por el problema de Siria.
Obama ya mantuvo frecuentes contactos con sus aliados europeos, árabes y asiáticos sobre el conflicto.
Crisis económica
Pese al protagonismo de los problemas en Medio Oriente, la reunión en San Petersburgo seguirá centrada en la necesidad de consolidar la salida de la crisis económica global, especialmente cuando los mercados emergentes comienzan a perder el brío de años anteriores.
La búsqueda de fórmulas para evitar el crecimiento desigual es una de las prioridades que serán tratadas en la cita, con el fin de reducir barreras al comercio, evitar excesivas intervenciones monetarias, luchar contra el cambio climático y hacer el crecimiento más inclusivo en las economías en desarrollo.